Cáritas Burgos y la Diputación se unen para apoyar la atención social en el mundo rural

Ayer, Cáritas diocesana de Burgos y la Diputación provincial firmaron un convenio mediante el cual se realizará el pago íntegro de los anticipos de ayudas de urgente necesidad que venía realizando la institución de la Iglesia. Esta medida va a permitir un doble objetivo: la promoción de talleres de formación ocupacional en diversos lugares como Villarcayo, Medina, Briviesca, Lerma o Roa; con el objetivo de apoyar la salida de la exclusión mediante la capacitación de las personas que reciben ayudas económicas. Por otra parte, supondrá un apoyo a los centros de menores de Lerma y Villarcayo. Estos centros están acompañando a unos 400 menores y jóvenes.

Los diversos equipos de Cáritas en la zona rural -los cuales suman más de 130 personas voluntarias- realizan 9.000 intervenciones de media a lo largo del año. Realizan procesos de detección y acompañamiento a las personas que en muchos casos, el 75% de ellos, carecen de empleo. Es destacable el hecho de que dos tercios de la población atendida son mujeres, y muchas de estas personas están afectadas por la falta de apoyos y vínculos sociales. Según los datos del Informe Foessa de Castilla y León, nuestra región destaca por la situación de envejecimiento (23%) y de aislamiento (5,3%) que sufre nuestra comunidad. Se trata de una diferencia de casi el doble con respecto a la media nacional.

Desde Cáritas se apuesta por la creación de proyectos de acompañamiento de estas realidades en las diversas zonas del entorno rural y se considera imprescindible una acción social y una promoción del desarrollo social más allá de la atención básica. Para ello, ocho personas contratadas coordinan esta atención social en la zona rural. Las más de 2.000 personas a las que ha alcanzado la atención el último año han contado, no solo con ayuda económica, sino con el apoyo social y personal de los equipos de Caritas, un aporte humano y moral que forma parte del saber hacer de toda la organización.