Una celebración penitencial presidida por el arzobispo inaugurará la Cuaresma
En la bula de convocación del Jubileo de la Misericordia, el papa Francisco pedía que «la Cuaresma de este Año Jubilar sea vivida con mayor intensidad, como momento fuerte para celebrar y experimentar la misericordia de Dios», un tiempo propicio para «poner en el centro el sacramento de la Reconciliación, porque nos permite experimentar en carne propia la grandeza de la misericordia». Cuaresma y penitencia son como las dos caras de una misma moneda y, en la diócesis, serán las dos dimensiones que estén presentes en una vigilia penitencial que tendrá lugar el próximo miércoles de ceniza.
Será el pastor de la diócesis, don Fidel Herráez, quien presida esta celebración que comenzará a las 18:30 horas. Se trata de una breve celebración comunitaria del perdón que constará de una breve liturgia de la palabra y confesiones. El mismo arzobispo confesará a los penitentes que quieran acercarse al sacramento. Al acto, organizado por la comisión diocesana para el Año de la Misericordia, están invitados a participar de forma especial los miembros de movimientos y asociaciones de fieles de la diócesis, así como comunidades parroquiales y religiosas.
La Cuaresma en el Año de la Misericordia
Tras la vigilia penitencial tendrá lugar la eucaristía de imposición de la ceniza, con la que queda inaugurado el tiempo litúrgico de la Cuaresma. No será, sin embargo, el único acto que se desarrolle en la diócesis con motivo de este año jubilar durante los próximos cuarenta días. La iniciativa «24 horas para el Señor» se llevará a cabo del 4 al 5 de marzo en distintos templos de la provincia y el cuarto domingo de Cuaresma, las parroquias de la diócesis harán público un comunicado, fruto de la reflexión sobre cómo cada comunidad parroquial es reflejo y testimonio de la misericordia divina.