El luto de viste de fiesta
El sonido de las cornetas y tambores de días atrás ha dado paso hoy a unos desfiles marcados por el júbilo y la fiesta. Dulzainas, castañuelas, bailes populares han sido la tónica de la última de las procesiones de la Semana Santa en la capital, marcada por el anuncio del júbilo pascual.
La imagen de Cristo Resucitado ha desfilado por Federico Martínez Varea, plaza Francisco Sarmiento, Alfonso X El Sabio, Clunia, avenida Cid Campeador, Concordia, Laín Calvo y Virgen de la Paloma. Por su parte, la imagen de la Virgen de la Alegría ha paseado por Fernán González, Avellanos, plaza Alonso Martínez, San Juan, Moneda, plaza Santo Domingo de Guzmán, Carnicerías, paseo del Espolón y arco de Santa María. Pasada la una del mediodía, y después de que el arzobispo presidiera la solemne misa estacional del domingo de Resurrección, ambas imágenes han entrado en la plaza Rey San Fernando, anunciándose el júbilo pascual con el Aleluya de «Haendel» y la danza del Santo, ante el aplauso de los cientos de burgaleses que llenaban el lugar. A continuación, don Fidel Herráez ha impartido la bendición a la ciudad. El acto ha finalizado con la interpretación de diversas danzas castellanas en honor de Cristo resucitado y su Madre.
Ha sido el último de los desfiles procesionales en una Semana Santa participativa y marcada por el buen tiempo en la ciudad, poco habitual en esta época del año.