Cinco colores para construir un mundo en paz
Como es habitual en las fechas próximas al día 1 de enero, Jornada Mundial de la Paz, el movimiento Justicia y Paz organizó una vigilia de oración por la paz en todo el mundo, una celebración que tuvo lugar ayer en la Catedral y en la que participaron alrededor de cien personas.
El simbolismo de los colores sirvió como argumento para la reflexión en esta hora de oración, presidida por Jesús Sancho, consiliario de Justicia y Paz. Son los colores explicados a un ciego que no los puede ver pero los aplica a situaciones de la vida. A cada uno de los asistentes se les repartió una cinta de colores distintos (amarillo, azul, verde, rojo, rosa) según las cuales se fueron agrupando por bloques para reflexionar sobre el significado del que a cada uno le había correspondido: amarillo, lugares de intercambio de productos, saberes y servicios sin afán de lucro; azul, lugares de resistencia contracultural con capacidad de edificar tiempos y espacios distintos; verde, lugares que protejan el entorno natural; rojo, lugares festivos; rosa, lugares de visibilidad y de derechos para identidades ocultadas y negadas por el discurso dominante.