Recuerdan que el proyecto de las nuevas puertas no se financiará con dinero público y que han aportado en tiempo y forma la documentación necesaria a las instancias pertinentes.

«Absoluta transparencia». Con estos dos vocablos, el Cabildo quiere salir al paso de la que consideran una «campaña de difamación» puesta en marcha en los últimos días contra el proyecto de la construcción de unas nuevas puertas para la Catedral, obra de Antonio López. A través de un comunicado difundido esta tarde, la institución catedralicia denuncia las informaciones propagadas en las últimas semanas, señalando que el proyecto no se financiará con dinero público y que en todo momento –«y así seguirá siendo»– ha actuado con «transparencia», siguiendo «los cauces establecidos para una modificación de este tipo en cualquier monumento Patrimonio de la Humanidad». Sostienen que las actuales puertas se encuentran «en mal estado», que «el cambio es necesario» y que el proyecto supone «una oportunidad única para abrir el arte, la Catedral y la ciudad al mundo».
En su nota, el Cabildo ratifica que el proyecto no se financiará con dinero público, y
adjunta una carta remitida por el regidor municipal,
Daniel de la Rosa, al vicario general de la archidiócesis, en la que afirma que «lo cierto y real es que el Ayuntamiento no aporta ninguna cantidad económica al posible cambio de las puertas de la Catedral de Burgos». Desde la Catedral recuerdan, «como siempre se ha dicho», que «la renovación de la portada será una realidad gracias al mecenazgo, que siempre ha estado del lado del arte y de la cultura, que perdura y genera valor incalculable a lo largo de los siglos».
Junto a ello, afirman que en la puesta en marcha del proyecto se han seguido todos los cauces establecidos aportando «la documentación necesaria a todas las instancias pertinentes y en los plazos requeridos, con absoluta transparencia». Asimismo, dicen «respetar» el informe dado por Icomos, mientras recuerdan
una vez más que «no es vinculante»: «No es la primera vez que Icomos elabora un informe desfavorable sobre proyectos que afectan al patrimonio cultural y que, sin embargo, finalmente han visto la luz».
Por último, defienden de nuevo el proyecto, al que califican como «una obra de arte contemporánea, firmada por un autor de enorme prestigio, artista de incuestionable reconocimiento internacional y Premio Príncipe de Asturias de las Artes». Defienden que López «ha gozado de absoluta libertad para concebir su propuesta» y que su creación «se incluirá en un monumento en el que conviven ya cinco estilos artísticos, fruto de cada etapa a lo largo de ocho siglos».
«El VIII Centenario del templo es la ocasión perfecta para dejar huella, impulsar el turismo en el momento más necesario y situar a Burgos en primera línea de cara al exterior», subrayan, a la par que sostienen que hoy «nadie entendería el museo del Louvre sin las pirámides ni el Parlamento alemán sin la cúpula de cristal». «Las catedrales son los monumentos más abiertos y populares. Burgos 2021 es la oportunidad para conectar la ciudad al futuro y para hacer historia a través de unas nuevas puertas, necesarias para la Catedral, que serán símbolo de unión y un legado para las futuras generaciones», concluyen.