Imagen del mes de abril: cruces arzobispales
Cruz arzobispal metropolitana
Como imagen del mes de abril presentamos una Cruz arzobispal metropolitana de brazos abalaustrados, que es una de las grandes obras de la orfebrería burgalesa. La historia de esta Cruz, que no ostenta marca alguna, puede seguirse con suficiente exactitud a través de la documentación catedralicia, considerando que su autor fue el platero burgalés Juan de Horna, que la realiza hacia 1537-38. Desde 1546 la Cruz aparece mencionada en diversos inventarios, pero sin una descripción minuciosa.
Cuando el obispado de Burgos fue elevado a sede arzobispal, por la bula de Gregorio XIII de 1574, debía contar con una Cruz procesional metropolitana, es decir, de doble travesaño. El Cabildo encarga al prestigioso platero Juan de Arfe hacía 1592 la transformación de la Cruz de Juan de Horna, a la que no se le alterará el diseño original y se limitará a continuar con el trabajo anterior, mediante la colocación de una segunda Cruz de brazos más cortos sobre la anterior. El 17 de agosto del mismo año, Arfe presentó al Cabildo un modelo de la Cruz arzobispal y se nombraron diputados para concertar con el artífice precio, peso, plazo y demás condiciones de su realización.
Cruz Arzobispal, regalo de la Reina Isabel II
Esta bella Cruz Arzobispal fue un generoso regalo que hizo la Reina Isabel II al arzobispo de Burgos en agradecimiento por su dedicación como preceptor de su hijo Alfonso XII. Es de plata sobredorada y fue realizada en unos talleres parisinos.
Las cruces de los brazos se adornan con estrellas de ocho puntas que enmarcan rombos en esmaltes azules cobalto y turquesa, alternando con blanco en los que aparecen el Espíritu Santo en esmalte blanco y oro en la parte alta y una cruz flordelisada en esmalte rojo que enmarca la cabeza del Crucificado.