Parroquias

Parroquia Santa Catalina – Aranda de Duero

Uno de los bloques que se construyó en régimen de cooperativa tenía 48 viviendas y se encontraba en el Camino de los Romerales, lo que ahora es la calle Pedro Sanz Abad, entre la avenida de Burgos y la calle Santa Margarita. La cooperativa había sido promovida por la HOAC (Hermandad Obrera de Acción Católica), de la que era consiliario uno de los coadjutores de Santa María, don Felipe Ontoso. En 1965 decide, tras consultarlo con el resto de sacerdotes de la parroquia, trasladarse a este bloque de viviendas para insertarse de lleno en la realidad de este barrio de nueva creación. El barrio pertenecía canónicamente a la parroquia de Santa María pero estaba claro que la lejanía de la iglesia y ser un barrio tan distinto al casco histórico, hacían necesario abordar la situación de una forma distinta.

El Decreto de creación de la parroquia fue el 8 de octubre de 1966. El hecho de que ya existiera jurídicamente una parroquia no significa que ya hubiese templo parroquial. El arzobispo encomienda al nuevo párroco (D. Felipe Ontoso), la compra del solar sobre el que se construirá la iglesia. La finca costó 473.475 pesetas y tenía una superficie de 3.156 metros cuadrados. Se adquirió a Doroteo San Juan y a los hermanos Alejandro y Alfredo Martínez. La Archidiócesis de Burgos aportó 233.000 pesetas; la parroquia de Santa María de la que se segregaba la nueva parroquia aportó 100.000 pesetas; la empresa INAVICO puso 100.000 pesetas; y diversas donaciones de personas del barrio ascendieron a 40.475 pesetas.