Cerebro, libertad y espiritualidad

Las jornadas de este año se desarrollaron los días 7, 8 y 9 de abril y han llevado como título «Cerebro, libertad y espiritualidad»
Las IV Jornadas ‘Ciencia y Cristianismo’ traían en esta ocasión un acercamiento a la investigación actual sobre el cerebro humano: ‘Cerebro, libertad y espiritualidad’. Como ya viene siendo habitual, el tema se afrontó desde tres ámbitos, con un experto para cada uno. El día 7, el conocido neurofisiólogo de la Complutense y de la universidad de Iowa, Francisco Mora Teruel, situó a los presentes en los últimos avances en el conocimiento del cerebro. El esfuerzo de la investigación actual está abriendo un campo de posibilidades desconocido. Insistió en que nos debemos acostumbrar a términos nuevos como ‘neuroeducación’. Es precisamente en este ámbito donde veremos notables progresos y ‘sorpresas’ en los próximos años, pues ‘desconocemos más de lo que conocemos del elemento más complejo de la evolución’
El día 8, el joven filósofo valenciano, Pedro Jesús Teruel, mostró las implicaciones de la investigación del cerebro sobre aspectos tan cercanos como la conciencia o la libertad. Su conferencia titulada ‘Cerebro, mente y libertad’ estuvo precedida por un encuentro-tertulia en el CENIEH (Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana con filósofos y profesionales de la medicina). La conferencia suscitó notable interés en el auditorio, prueba de ello fueron las continuas preguntas sobre conciencia, manipulación, clonación de seres…
Por último, el día 9, fue el jesuita Javier Monserrat Punchades, el encargado de afrontar el problema teológico, desde el título ‘Cosmos, mente y espiritualidad’. Con no pocas alusiones al primer ponente y su libro ‘El dios de cada uno’, insistió en la importancia de los avances en el conocimiento de nuestro cerebro, mostrando que esto no menoscaba la posibilidad de abrirse a un Dios trascendente y relacionarse con él. Esta posibilidad viene dada por la misma Revelación de ese Dios. Tal revelación excede a nuestro cerebro.
De nuevo el salón de la Casa del Cordón se quedé pequeño para acoger al público asistente. La Facultad de Teología y la Vicaría de Cultura del arzobispado de Burgos, organizadoras del evento, ya piensan en la quinta edición, tal y como se apuntó al final de las Jornadas.