¡Viva la Virgen del Carmen!
Burgos no es una ciudad costera. Sin embargo, la devoción y el cariño hacia la Virgen del Carmen está bien arraigada en la localidad. Prueba de ello ha sido el trasiego de burgaleses que, en un goteo constante, se han acercado hasta su santuario para rendir pleitesía a la Flor del Carmelo en el día de su fiesta. Entre ellos se encontraba también el arzobispo de la diócesis, don Fidel Herráez Vegas, quien ha presidido una solemne eucaristía esta mañana, así como el Rosario y procesión con la Virgen en la tarde de hoy.
Han sido centenares los burgaleses que se han acercado hasta el Paseo del Empecinado para participar en este popular acto mariano, en el que no han faltado los vivas y aplausos a la Madre y Hermosura del Carmelo mientras su imagen subía y bajaba de la carroza, obra del escultor burgalés Eulogio Valladolid. Con este Rosario se han concluido los actos de piedad que se han prolongado con una novena desde el pasado 7 de julio.
La devoción a la Virgen del Carmen se remonta al siglo XII, cuando unos monjes eremitas comenzaron a formar una comunidad religiosa a los pies del monte donde se refugió en su día el profeta Elías. Con el paso de los años, el Papa acabó por aceptar la devoción a la Virgen del Carmen y, desde entonces, son muchas las instituciones religiosas que tienen que ver con esta advocación mariana. En Burgos, los Padres Carmelitas atienden el santuario del Carmen, en la que no faltan cofrades y devotos de la Virgen María.