Imagen del mes de mayo: «Pentecostés», de Pedro de la Campaña

La imagen del mes de mayo, «Pentecostés», es una pintura al óleo sobre tabla de roble del Báltico, rematada en medio punto y realizada por el artista belga Pedro de Campaña hacia 1556.

Pentecostés 2

 

«Pentecostés”, imagen del mes de junio, es una pintura al óleo sobre tabla de roble del Báltico, rematada en medio punto y realizada por Pedro de Campaña hacia 1556. Es probable que ingresase en la Catedral de Burgos en fecha no muy lejana a la de la restauración de la Capilla de Santa Ana, costeada por el Duque de Abrantes hacia 1868-1870.

 

A juzgar por la extraordinaria calidad de esta obra y el delicado alarde de su técnica, se puede asegurar que es enteramente de la mano de Campaña y corresponde a un momento especialmente afortunado de su producción. En esta pintura hay que resaltar la elegancia de los pliegues perpendiculares en los mantos, el refinamiento del colorido y la acertada y simbólica disposición de los apóstoles.

 

En esta obra el Pentecostés lucano se desarrolla en el interior de una estancia cerrada por un muro desnudo curvo y cubierta por una bóveda que sirve de fondo a la paloma blanca del Espíritu Santo. Como Matías ya había sido elegido (Hch 1,26) son doce los apóstoles en oración, con la figura de la Virgen en el centro que reciben en sus cabezas las lenguas de fuego procedentes del Espíritu Santo. El asombro, ante esta irrupción «de repente» (este término solo aparece tres veces en el Nuevo Testamento y las tres en Hechos) les hace gesticular incluso con las manos, que tienen una gran expresividad, y adoptar distintas posturas que reflejan temor, tensión, incomprensión ante algo inesperado, sublime, misterioso.

 

Los doce Apóstoles están distribuidos simétricamente en cuatro grupos de tres cada uno; dos grupos a la derecha de María y dos a su izquierda. Esta presentación recuerda Ap 21,12-13, en la que se relata la distribución de las puertas de la Jerusalem celestial en las cuatro fachadas. Se trata de un juego numérico con el tres y el cuatro que multiplicados dan doce y sumados siete, dos números de gran fuerza simbólica.

 

El autor

 

Pedro de Campaña, nombre españolizado de Pieter Kempeneer, nació en Bruselas en 1503, perteneciendo a una familia de artistas y humanistas. Educado en la tradición flamenca, Campaña pasó algún tiempo en Italia (Bolonia, Venecia y Roma) donde probablemente se relacionó con pintores del primer manierismo romano como Perin del Vaga (1501-1547) y Polidoro de Caravaggio (1492/1495 -1543) y conformó un tipo de pintura que aunaba el dramático patetismo norteuropeo y buena parte de la monumentalidad, del sentido compositivo y del colorido de la pintura romana.

 

En 1537 llega a España, estableciéndose en Sevilla, ciudad que experimentaba entonces un extraordinario desarrollo económico, artístico y social y un pintor como Campaña se adecuaba al perfil de otros artistas nórdicos que hallaron acomodo en esta floreciente urbe. El trabajo de todos ellos estaba destinado a dotar de imágenes a las nuevas parroquias, iglesias conventuales, capillas y oratorios privados, que fueron floreciendo a lo largo del siglo XVI.

 

Ocupó un puesto relevante en la pintura sevillana hasta su regreso a Bruselas en 1562, donde trabajó en la fábrica de tapices hasta 1580, fecha probable de su fallecimiento. Según su biógrafo Francisco Pacheco, dominó el dibujo y las matemáticas y fue muy diestro en arquitectura y escultura.

 

Más: descargar documento completo sobre la obra

Comentarios

Los comentarios están cerrados para esta noticia.