El arzobispo dirige un retiro de Cuaresma para profesores de Religión
En la tarde de ayer jueves, el arzobispo, don Mario Iceta, dirigió el retiro cuaresmal a los profesores de Religión de la escuela pública. La reflexión del pastor de la archidiócesis se centró en el episodio del ciego de nacimiento que narra san Juan en el capítulo noveno de su evangelio.
Como detalló el arzobispo, la curación del ciego por parte de Jesús dio lugar a una encendida polémica entre el ciego y las autoridades religiosas, en definitiva, entre el que reconocía su ceguera y pedía ver y los que, no viendo, no era capaces de reconocer su ceguera.
«Como el ciego de nacimiento también nosotros nacimos ciegos y fuimos iluminados por Cristo en el bautismo», aseguró a los docentes. «Pero no basta con haber recibido la luz; es necesario convertirse a ella e irradiarla, no como luz propia sino como luz recibida».
Las últimas palabras de la meditación animaron a los presentes a ser luz en todas las circunstancias de la vida de cada uno y, de un modo especial, en el seno de la familia.
Los profesores de Religión suelen mantener un retiro de oración durante los principales tiempos litúrgicos, Adviento, Cuaresma y Pascua, uno por cada trimestre del curso escolar.