Discernir la Iglesia que Dios quiere
El desarrollo de las fases intermedia y final de la Asamblea Diocesana y la participación de la Iglesia burgalesa en el Sínodo de los Obispos han marcado la última sesión de trabajo del Consejo Pastoral Diocesano, reunido esta mañana en el Seminario de San José. El arzobispo, don Mario Iceta, ha advertido del «riesgo» que supone pensar que «el campo, la semilla y la Iglesia» sean algo «nuestro y no del Señor». Por eso, ha indicado que el camino de todo proceso sinodal ha de ser el discernimiento: «La ecología que subyace ha de ser la de la oración, la del discernimiento, la de saber elegir las propuestas que vienen de Dios». «Él nos ha elegido para mostrar el camino de su Iglesia en Burgos, el Señor quiere contar con nosotros y esto es un gran don pero también una gran responsabilidad», ha indicado a los miembros de este organismo sinodal.
El orden del día ha centrado su atención en el recorrido que deberá seguir la fase final de la Asamblea Diocesana, que comenzará el 5 de febrero con una eucaristía en la Catedral y concluirá el 5 de junio, coincidiendo con la clausura del Año Santo de la Catedral. Entre 150 y 200 personas se reunirán en esos meses a lo largo de distintos fines de semana para discernir las líneas de acción para la archidiócesis en los próximos años. El trabajo se completará, además, con distintas acciones celebrativas y divulgativas y el respaldo de distintos organismos que faciliten la redacción de documentos y el desarrollo de las sesiones.
Por una Iglesia sinodal
El próximo Sínodo de los Obispos (que comenzará su andadura en Burgos el próximo 17 de octubre con una eucaristía en al Catedral) ha marcado la segunda parte de la reunión del Consejo Pastoral. Un sínodo en el que se involucrarán todas las diócesis del planeta y cuyos principales «referentes» en Burgos son el vicario de Pastoral, José Luis Lastra, y la delegada de Apostolado Seglar, Lucía Ferreras. Ambos, designados por el arzobispo para tal fin, deberán redactar un documento que enviarán a la Conferencia Episcopal para que, a su vez, llegue a la fase final del Sínodo, que se celebrará en Roma en 2023. El Consejo ha debatido qué personas y de qué manera pueden participar en este proceso sinodal internacional que busca que toda la Iglesia camine de forma conjunta.
La sesión también ha contado con varias informaciones relativas al Año Jubilar de la Catedral y el Año de la Familia «Amoris Laetitia». Los miembros del consejo, además, han elegido a Teresa Gárriz como nueva secretaria de este organismo en sustitución de Carlos Izquierdo, actual vicario general.