La Iglesia en Burgos abraza a la Catedral y acoge un plan pastoral para celebrar su octavo centenario
La Catedral ha sido la gran protagonista del XI Encuentro Pastoral Diocesano, que se ha celebrado hoy con el lema «Piedras vivas, Iglesia en camino… ¡Súmate!». Una jornada cuyo principal objetivo ha sido lograr la adhesión de todos los agentes pastorales y fieles en general al proyecto VIII Centenario de la Catedral. Y es que para la Iglesia en Burgos esta efeméride es una oportunidad desde muchos puntos de vista (cultural, económico, social…) pero también para alcanzar una mayor conciencia eclesial y diocesana por parte de cada uno de sus miembros.
El encuentro ha arrancado con la presentación del plan pastoral diseñado con motivo de la celebración del aniversario de la seo, a cargo de Felipe Rodríguez, Pilar Alonso Abad y el vicario general, Fernando García Cadiñanos. El itinerario pastoral que se ha marcado la diócesis se concreta en unos objetivos para el tiempo que resta hasta la culminación del aniversario. Este curso se centrará en la participación: conseguir que toda la diócesis vaya asumiendo la celebración como un acontecimiento fundamentalmente eclesial. Durante 2019-2020 la acción pastoral pondrá énfasis en lo cristológico: el que convoca no es el edificio, es Cristo el que llama e invita a celebrar que somos Iglesia y estamos llamados a evangelizar. En 2020-2021 el objetivo es la celebración del Año Jubilar, un estímulo para renovar desde la santidad nuestra vocación cristiana. Finalmente, el curso 2021-2022, que llevará por lema «Fructifica», se centrará en el compromiso.
En la elaboración y desarrollo de este plan pastoral trabaja una comisión formada por Vicaría General, Vicaría Pastoral, Cabildo Catedral, delegaciones de Patrimonio, Enseñanza, Cultura y Medios y cuatro laicos representantes de diversos ámbitos, con unos objetivos claros: crecer en comunión diocesana, renovar la vida cristiana a través del año jubilar y fomentar el diálogo entre fe y cultura.
El arzobispo, don Fidel Herráez Vegas, ha insistido en que lo más importante de esta celebración no es la Catedral en sí misma. «Incluso aunque fuese una tienda de campaña, bastaría», ha dicho. «El verdadero patrimonio, lo que da sentido al centenario, es aquello que le ha dado origen: la presencia de Cristo y de los que le siguen; lo más importante es el Pueblo de Dios en camino». «Ojalá el centenario nos sirva de verdad a todos –ha recalcado–, que se fortalezca la Iglesia diocesana y dé frutos de vida para toda la sociedad burgalesa».
En un segundo momento se han compartido varias experiencias de Iglesia en Burgos. Los participantes, llegados de muy diversos puntos de la diócesis, han conocido la actividad de la Pastoral del Sordo, del coro parroquial de Cardeñadijo, del grupo Parteluz y de Cáritas Miranda. Para terminar la sesión matinal, los asistentes, divididos en grupos, han visitado distintos espacios de la Catedral y de su entorno.
Abrazo y aplauso a la Catedral
Tras la comida y posterior sobremesa en el Seminario, que ha contado con la actuación del Teatro de Títeres «El Papamoscas», los participantes se han desplazado a la Catedral, donde se ha vivido un momento de oración que, bajo el título «Piedras luminosas», ha combinado textos con cantos, animados por el coro juvenil «Lumina Vokal Emsemble».
El encuentro ha culminado con un gran abrazo y aplauso a la Catedral, al que se han sumado numerosos burgaleses a pesar del frío que ha acompañado toda la jornada.
Para ampliar: Galería fotográfica de la jornada