Con el lema «Caminemos en una vida nueva», la Iglesia celebra este fin de semana la iniciativa «24 horas para el Señor», la propuesta cuaresmal de oración y reconciliación instituida por voluntad del papa Francisco hace ahora once años. Coincidiendo con la víspera del domingo IV de Cuaresma –también conocido como Laetare, o «de la alegría»–, las iglesias de todo el mundo abrirán sus puertas para permitir a los fieles acceder a la confesión sacramental y a la adoración eucarística como camino de preparación para celebrar la próxima Pascua.
La archidiócesis de Burgos también se suma a la propuesta del Santo Padre, que se desarrollará en varios templos de la provincia desde la tarde del viernes 8 a la del sábado 9 de marzo. El primero en abrir sus puertas será la parroquia de San Nicolás de Bari de Miranda de Ebro, a las 18:00 horas del viernes. Allí, hasta las 19:00 horas del sábado, los sacerdotes del arciprestazgo estarán disponibles para la confesión sacramental, mientras el Santísimo Sacramento estará expuesto de forma permanente. En Aranda de Duero la parroquia escogida para desarrollar la iniciativa es la de Santo Domingo de Guzmán, que permanecerá abierta de 20:00 a 03:00 la noche del viernes y de 07:00 a 19:30 el sábado.
En la ciudad de Burgos, las «24 horas para el Señor» se desarrollarán en dos arciprestazgos. Las parroquias de Gamonal están citadas en Nuestra Señora de Fátima, desde las 18:00 horas del viernes a las 19:00 horas del sábado. El arciprestazgo de Vega ha escogido la parroquia de San Julián Obispo para desarrollar la propuesta, que se extenderá desde las 20:00 horas del viernes a la misma hora del sábado.
Otras propuestas diocesanas
Además de las «24 horas para el Señor», el calendario diocesano ofrece otras propuestas de oración y reflexión para este fin de semana y el resto de la Cuaresma. Los talleres de Oración y Vida organizan un retiro con el título «El arte de ser feliz» para el sábado, en la parroquia de San Josemaría Escrivá de 10:00 a 18:00 horas. Además, José Luis Lastra, consiliario de la delegación de Pastoral de Migraciones, animará el retiro que organiza esta pastoral la tarde del domingo 10 de marzo (de 17:30 a 20:00 horas) en la parroquia de San Julián Obispo.
La Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Española (CEE) ha elegido este martes, 5 de marzo, al arzobispo de Burgos, Mons. Mario Iceta Gavicagogeascoa, como miembro de la Comisión Ejecutiva de la institución por un periodo de cuatro años. Mons. Iceta ha sido elegido en primera votación con un total de 37 votos. De este modo, los obispos españoles vuelven a depositar su confianza en Mons. Iceta, que ya ha sido miembro de la Comisión Ejecutiva durante el anterior mandato. Como miembro de la Comisión Ejecutiva, Mons. Iceta deberá ocuparse de los asuntos ordinarios y de urgencia dentro de la CEE. La función principal de este organismo es ejecutar las decisiones tomadas por la Asamblea Plenaria y la Comisión Permanente.
De hecho, entre las competencias de este organismo se encuentran: preparar las reuniones y el orden del día de la Comisión Permanente; acordar la convocatoria de reuniones extraordinarias de la Permanente cuando sea necesario; velar por la ejecución de los acuerdos tomados por la Asamblea Plenaria y la Comisión Permanente. Además, los miembros de la Ejecutiva ejercen las funciones asignadas por la Plenaria, la Permanente o el Presidente de la Conferencia, y mantienen reuniones mensuales para tratar asuntos urgentes entre las Permanentes y, si es necesario, publicar notas o puntualizaciones.
Mons. Iceta ha sido elegido en una jornada en la que los obispos también han elegido al nuevo presidente de la CEE, Mons. Luis Javier Argüello García, arzobispo de Valladolid; al vicepresidente, el cardenal José Cobo Cano, arzobispo de Madrid; y al resto de miembros de la Ejecutiva. El arzobispo de Burgos ha sido elegido como tercer miembro, tras los nombramientos para esta Comisión del obispo de Getafe, Mons. Ginés García Beltrán, y del arzobispo de Oviedo, Mons. Jesús Sanz Montes. Además, tras él han sido nombrados el arzobispo de Valencia, Mons. Enrique Benavent Vidal, el arzobispo de Sevilla, Mons. José Ángel Saiz Meneses, y el arzobispo de Granada, Mons. José María Gil Tamayo. Estos son los 6 miembros que, junto a presidente, vicepresidente y secretario general, conforman la Comisión Ejecutiva para los próximos 4 años.
Mons. Iceta ya ha sido miembro de la Comisión Ejecutiva de la CEE en el anterior cuatrienio (2020-2024) y, antes de eso, fue vicepresidente de la Comisión Episcopal de Apostolado Seglar y presidente de la Subcomisión Episcopal para la Familia y la Defensa de la Vida desde 2014 a 2020. Era miembro de esta Subcomisión desde el año 2008. También ha sido miembro de la Comisión Episcopal de Liturgia de 2011 a 2014.
Continuando con las propuestas de oración y reflexión programadas durante la Cuaresma, los profesores de Religión han mantenido recientemente su retiro espiritual, dirigido por el rector del Seminario de San José, Javier Pérez Illera, con el título «Ahora es tiempo de gracia».
Haciendo haciendo uso de varios textos del Nuevo Testamento, Pérez Illera desgranó la necesidad que todos tienen de retirarse para, alejándose de las obligaciones de cada día, poder orar. Habló también de la importancia de cuidar los tres elementos que la Iglesia y el evangelio proponen para crecer en purificación, como la oración, el ayuno y la limosna.
En este sentido, incidió que «la oración nos ha de servir para sentirnos mirados con el amor que Jesús miró a sus apóstoles cuando les llamaba a seguirle»; el ayuno, para que «nos miremos a nosotros mismos y reconozcamos aquello a lo que estamos apegados y podemos dejar atrás» y la limosna para «darse desde lo profundo», «en especial como profesores, siendo buenos samaritanos de nuestros alumnos y compañeros».
El retiro concluyó con la celebración de la eucaristía, presidida por el vicario de Pastoral, José Luis Lastra. En ella se tuvo un especial recuerdo a Jesús Mari Villaverde, quien durante tantos años (como profesor y desde la delegación) acompañó a los profesores en estos retiros y en otros momentos, «en los que su disposición, profesionalidad y cercanía han dejado un vacío y una esperanza en todos los profesores», como explican desde la delegación para la Educación.
El arzobispo de Burgos, Mons. Mario Iceta Gavicagogeascoa, ha mantenido este pasado miércoles un encuentro con los sacerdotes de más reciente ordenación del presbiterio burgalés. La basílica nacional de la Gran Promesa de Valladolid ha sido el escenario para esta jornada, la segunda de las tres que tradicionalmente se celebran cada curso.
El encuentro ha comenzado por la mañana, con la llegada al santuario de la Gran Promesa. Allí, una de las personas que trabajan en el templo les ha realizado una visita guiada por la basílica y por la capilla en la que se celebró la primera novena al Sagrado Corazón de Jesús, en España -y en el mundo, porque se rezó aquí por primera vez-. Después, los sacerdotes han concelebrado junto al arzobispo la misa de las 12:00h. Una celebración en la que Mons. Iceta les ha invitado a revivir su sacerdocio desde el Corazón de Cristo.
Tras la misa, el arzobispo ha impartido una charla a los participantes -a los que se ha unido el obispo emérito de Santander, Mons. Manuel Sánchez Monge– que ha girado en torno a la carta con la que el papa Benedicto XVI convocaba el Año Sacerdotal con motivo del 125 aniversario del Santo Cura de Ars. Un texto elegido porque, según ha explicado el arzobispo, «glosa muy bien el Sagrado Corazón de Jesús con la vida espiritual y sacerdotal».
Los sacerdotes de más reciente ordenación del presbiterio burgalés también han tenido ocasión de celebrar con su arzobispo una comida de fraternidad y, tras ésta, una tertulia alrededor de un café. Con ese rato de compartir experiencias y opiniones ha concluido este encuentro de sacerdotes jóvenes, momento en el que cada uno ha partido a su lugar de origen.
La sección de Patrimonio del arciprestazgo del Vega ha organizado para este curso unas visitas temáticas tituladas «Fe y Arte en el museo del Retablo». Se trata de una propuesta que pretende profundizar en el significado teológico que encierran las obras de arte custodiadas en este espacio diocesano, ubicado en la iglesia de San Esteban, y que recibe cada vez más visitas turísticas.
Estos encuentros se desarrollarán hasta final de año y centrarán su atención en distintas obras de arte atendiendo a distintas propuestas de visita, una diferente cada mes. El 22 de marzo se programa una visita acerca de la Semana Santa y la Pascua; el 26 de abril, la Virgen María será marcará el recorrido; el 24 de mayo será el turno de los profetas, apóstoles y evangelistas y el 21 de junio concluirán estos encuentros en torno a la figura de los santos.
La iniciativa arrancó el pasado 23 de febrero, cuando varios miembros de las parroquias de la zona sur de la ciudad profundizaron en el ciclo de la Navidad, contemplando obras de arte relacionadas con los misterios de la anunciación, la encarnación, la visitación, la adoración de los magos, el sueño de José, la presentación de Jesús en el templo, la huida a Egipto o el bautismo de Jesús en el Jordán. Javier Caballero, sacerdote experto en arte y patrimonio y que ejerce su actividad pastoral en este arciprestazgo, es el encargado de guiar estas visitas.
Encuentro «Sellados»
Otra de las propuestas pastorales comunes del arciprestazgo ha sido el desarrollo de una nueva edición de su encuentro «Sellados», pensado para los adolescentes que continúan su formación en estas parroquias y que se desarrolla una vez al trimestre. El último encuentro se desarrolló en San Julián Obispo.
Teniendo como marco la Cuaresma y la próxima Pascua, los más de ochenta jóvenes que participaron en el acto, depositaron ante la cruz sus deseos de conversión, inquietudes, esperanzas e ilusiones. Además del momento de oración, la jornada también combinó ratos distendidos de juego y animación.