Voluntared Escuela Diocesana impartirá este verano dos cursos intensivos para la obtención del título oficial de Monitor de Tiempo Libre, reconocido por la Junta de Castilla y León. El primero de ellos se desarrollará del 3 al 9 de julio y el segundo del 28 de agosto al 3 de septiembre, ambos en horario de 10:00 a 14:00 y de 16:00 a 20:00 h.
El curso consta de una fase teórica de 150 horas (de ellas 56 presenciales y 94 telemáticas) y una de prácticas de 150 horas, y existe la posibilidad de convalidar materias según la experiencia y formación del alumno.
Voluntared se compromete a proporcionar prácticas, que podrán realizarse de manera intensiva en un campamento, marcha volante o ruta, albergue o campo de trabajo con una duración mínima de diez días, o también pueden realizarse de manera extensiva, durante un período no inferior a 3 meses, en actividades de tiempo libre continuadas.
Los requisitos para acceder al curso son tener cumplidos los 18 años y poseer el Graduado Escolar o el Graduado en Educación Secundaria Obligatoria.
Desde que comenzara su visita pastoral a la diócesis en abril de 2016, el arzobispo ha conocido cerca de 200 parroquias. Ayer mismo daba por concluida su visita a las parroquias del arciprestazgo de Aranda de Duero con encuentros con distintos grupos y realidades arciprestales de la zona.
A su llegada a la capital de la Ribera, don Fidel Herráez conoció las tres sedes de Cáritas Aranda: La sede central, que está en la Casa de la Iglesia, donde mantuvo una reunión con la Comisión Permanente de Cáritas arciprestal y conoció los programas de acogida y de droga; el economato, que está junto al colegio de Dominicas, y el programa de empleo y la tienda Arrropa, en el barrio de Santa Catalina, donde conversó con los participantes en el curso de formación en cocina.
La jornada prosiguió con una reunión con los sacerdotes del arciprestazgo, con los que también almorzó. El arzobispo escuchó su valoración sobre las diversas actividades arciprestales por áreas pastorales; luego don Fidel les expresó sus conclusiones tras las visitas pastorales a las parroquias y al arciprestazgo, con sus luces, penumbras e interrogantes. Tras la comida continuó el diálogo de los sacerdotes acerca de las impresiones del arzobispo. Al final don Fidel se quiso fotografiar con los tres sacerdotes jubilados que permanecen en el arciprestazgo, a quienes ha agradecido de un modo particular su tarea.
Al comienzo de la tarde, el arzobispo visitó el Centro que Cáritas arciprestal tiene en la misma parroquia de Santa Catalina para apoyo a la infancia, donde conversó con los monitores del programa. Sucesivamente, conoció después tres realidades arciprestales: La comisión arciprestal de Migraciones, más algunos representantes de colectivos fuertemente implantados en Aranda (Bulgaria, Ecuador, Honduras); el abundante grupo arciprestal de Manos Unidas y la comisión arciprestal de Fe y Cultura, que entre otras cosas lleva las relaciones ecuménicas. De hecho, en el encuentro participaron dos pastores de dos iglesias evangélicas presentes en Aranda.
La jornada concluyó en la ermita de la Virgen de las Viñas con la oración de vísperas, a la que estaban invitados los miembros del Consejo arciprestal y de las diversas comisiones arciprestales. Don Fidel dirigió unas palabras a los presentes. Se concluyó la visita rezando la oración del Centenario de la Coronación canónica de la Virgen de las Viñas.
Mañana jueves, la plaza de Mío Cid de la capital volverá a ser escenario de una nueva concentración de la HOAC de Burgos con motivo del reciente fallecimiento de un trabajador. Se trata de una concentración para solidarizarse con los trabajadores que han sufrido accidentes de trabajo, sus familias y el resto de las víctimas. También quieren llamar la atención a instituciones públicas, empresas y sociedad en general sobre la gravedad de estos sucesos en cuya erradicación todos estamos implicados.
Se trata de un acto que la Hermandad Obrera de Acción Católica de Burgos repite con demasiada frecuencia últimamente y que se enmarca dentro de su campaña «Trabajo digno para una sociedad decente».
En la concentración de mañana se tendrá un especial recuerdo por Juan José Murga Martínez, de 46 años, que sufrió un accidente laboral el pasado 28 de abril cuando estaba trabajando con una máquina en la fábrica de tableros Kronospan, ubicada en el barrio burgalés de Castañares. Falleció el miércoles 7 de junio a consecuencia de este accidente.
