El arte al servicio de la Semana Santa centra la segunda jornada de la Semana del Cofrade
Con asistencia de numeroso público, tuvo lugar ayer la segunda jornada de la Semana del Cofrade, que se está desarrollando estos días en la diócesis. En esta ocasión, el ponente ha sido Juan Álvarez Quevedo, vicepresidente del cabildo de la catedral y delegado diocesano de patrimonio, cargo en el que lleva ya 22 años, según manifestó Lucinio Ramos, delegado de religiosidad popular y cofradías en la presentación del ponente.
Álvarez Quevedo disertó sobre el tema «Arte y Mensaje en el Camino de Pascua». Partió de la figura de Cristo como «protagonista de un camino que se revive especialmente en Semana Santa, pero que tiene una proyección continua en la vida de cada uno de nosotros», en palabras del conferenciante. A lo largo de su exposición, desarrolló siete puntos. Partiendo de «un condenado a muerte», es decir, de la vida de Cristo en los primeros momentos de su Pasión y del camino del Calvario, describió la soledad de Cristo en ese camino, situación que tantas personas de entre nosotros comparten muy a menudo. El tercer paso de su intervención lo tituló «una cruz en el camino», «realidad que ayuda a comprender nuestras cruces de la vida», en expresión suya. Se detuvo también en la figura de María, «la Madre del camino», describiéndola como modelo de entrega, haciendo alusión a su acompañamiento como modelo para el cristiano en la cercanía para con los demás. Idea que reforzó a la hora de hablar de «los cirineos de la vida», capítulo con el que ha invitado a todos al acompañamiento de las personas que están solas en la vida, atravesando tragedias personales. Con los dos últimos capítulos «baja de la Cruz» y «camino de la gloria», el conferenciante quiso actualizar el descendimiento de Cristo de la cruz para entregárselo a su Madre, «imagen que nos ha de mover a tener entrañas de madre para cobijar a los maltratados por la sociedad, con la confianza de que el final de la persona es la vida resucitada, signo siempre de esperanza para el creyente de hoy», en palabras finales de Álvarez Quevedo. Los asistentes le brindaron un fuerte aplauso, felicitando al ponente.
A lo largo de toda la conferencia, se proyectaron diversas obras de arte de la diócesis, donde los muchos artistas han dejado magníficas obras, correspondientes a los momentos más trascendentales de la vida del Señor. Antes de finalizar el acto, hubo un turno de preguntas, en el que algunos participantes han compartido experiencias de celebraciones religiosas del mundo rural.
El acto se cerró con la intervención de Lucinio Ramos, felicitando y dando gracias al delegado de Patrimonio, y a los numerosos asistentes, invitándoles a la jornada de hoy, en la que cuatro personas darán su testimonio personal de cofrades. De nuevo, el acto estará abierto a todos y volverá a celebrarse en el Aula Magna de la Facultad de Teología, a las 19:30 horas.