La Iglesia, en todo el mundo, se ha unido hoy en oración por los frutos de la próxima asamblea general del sínodo de los obispos. También en Burgos el Pueblo de Dios se ha congregado en la catedral para rezar, junto a la Virgen María, por los trabajos finales del proceso sinodal, en el que viene caminando la Iglesia desde hace unos años y que recientemente concluía su fase continental.
María se puso en camino a visitar a su prima Isabel «respondiendo a la inspiración de Dios». «El movimiento no sale de ella», ha dicho el arzobispo en su homilía, y nosotros «hemos de percibir la inspiración del Espíritu para proclamar las maravillas de Dios». Para don Mario Iceta, el sínodo no es un ejercicio de «auto referencialidad», sino «caminar juntos detrás del Señor», pues es él «quien abre el camino» «con vistas a la misión». «El Espíritu inspira y mueve, él es el protagonista», ha insistido.
Para ello es necesaria la respuesta del Pueblo de Dios, hace falta «un acto de fe». «La sinodalidad no es un ejercicio de sociología y de poner delante nuestras ideas. Dios lo hace todo, todo es fruto del Señor y él requiere nuestra fe», ha explicado. «La sinodalidad es fruto del Espíritu. Él logra la unidad más allá de cualquier pensamiento o sentimiento». Una unidad que se resume «en siete versículos» de la Biblia –los que se han proclamado en la segunda lectura– y que hablan «del estilo sinodal de la Iglesia»: amor cordial, no ser perezosos ni negligentes, estimar a los demás más que a nosotros mismos, ser fervorosos sirviendo constantemente al Señor y a los hermanos.
Rosario
Antes de la misa, los fieles congregados en la basílica, dedicada a Santa María la Mayor, han rezado el Rosario, siguiendo las meditaciones propuestas por la Conferencia Episcopal Española. La fecha coincidía en Burgos, además, con el 25 aniversario de la clausura del Sínodo Diocesano, que involucró a más de 12.000 personas.
Ministros ordenados, personas consagradas, jóvenes, una familia cristiana y personas de la tercera edad han rezado los misterios gloriosos implorando a la Virgen «dejar de ser una Iglesia de museo, hermosa pero muda, con mucho pasado y poco futuro» y evitar que el Sínodo se transforme en «discusiones estériles». A ella han encomendado «la celebración y el fruto de la próxima asamblea del sínodo de los obispos para que la Iglesia, a impulsos del Espíritu, crezca en comunión, en participación y en espíritu de misión».
La catedral de Burgos se convierte, para la fundación Caja de Burgos, en escenario cultural. Tras la celebración del VIII Centenario, esta entidad y el cabildo han suscrito un convenio de colaboración para desarrollar durante este año 2023 encuentros, diálogos y otros actos culturales abiertos a toda la población con un presupuesto de 20.000 euros.
Entre las actividades programadas figura la continuación de ‘Diálogos en la Catedral’, uno de los eventos que más público ha arrastrado durante el Centenario de la Catedral. Promovido por la Fundación VIII Centenario y la Facultad de Teología, estos encuentros ponen en diálogo a distintas personalidades del mundo de la cultura, el deporte y el espectáculo, y por el que han desfilado Vicente del Bosque, Peridis, Juan José Omella, Luis Argüello y Tamara Falcó, entre otros muchos.
La pandemia obligó a suspender en marzo de 2020 el primero de estos encuentros, protagonizado por el sobrino del papa Francisco, el jesuita argentino José Luis Narvaja Bergoglio, y la periodista Eva Fernández, corresponsal de COPE en el Vaticano e Italia. Ahora, la fundación Caja de Burgos retoma este encuentro, que tendrá lugar el próximo lunes 5 de junio a las 20:00 horas en un acto abierto al público (entradas disponibles en Cultural Cordón) y que podrá seguirse en directo a través de la web de Cope Burgos.
El moderador del diálogo será el canónico y teólogo José Luis Cabria. Según explica, el evento servirá para conocer la faceta más cercana del Papa. «Su sobrino tiene una relación muy personal con su tío y Eva Fernández ha seguido a Francisco desde muy cerca». Por ello, espera que ambos cuenten no la teología del Papa, sino «su parte más humana y más desconocida».
José Luis Narvaja es profesor de Teología Patrística en la Universidad Católica de Córdoba (Argentina) y en el Pontificio Istituto Biblico (Roma). Además de dedicarse a la enseñanza, destina parte de su tiempo a la investigación y a la redacción de artículos y libros en el campo de la teología antigua y medieval. Eva Fernández, por su parte, es autora del libro ‘El Papa de la ternura’, en el que cuenta algunos de los momentos que más le han impactado mientras seguía al Santo Padre. Tiene una amplia trayectoria profesional tanto en el periodismo escrito como en radio. Durante las dos décadas que lleva vinculada a la emisora, ha desempeñado labores de producción y redacción tanto en los servicios informativos como en los programas ‘Herrera en COPE’, ‘La Linterna’, ‘La Tarde’, ‘Fin de semana’ y ‘La Linterna de la Iglesia’.
Diecinueve adultos recibieron el pasado viernes 26 de mayo el sacramento de la confirmación en la parroquia de Santa María de Aranda de Duero. El arzobispo de Burgos, don Mario Iceta, se trasladó hasta la capital de la ribera para administrar este sacramento a las personas que no accedieron a él durante su adolescencia y juventud. Una celebración en la que el arzobispo animó a las personas que dieron este paso importante, especialmente a los matrimonios: «El Espíritu Santo os ayudará a vivir en plenitud vuestra vida matrimonial. Os enseñará a perdonaros mutuamente y a amaros», señalaba.
La catequesis de confirmación de adultos es una oferta que se da en la archidiócesis para todos aquellos bautizados, mayores de 25 años, que desean completar su camino de iniciación cristiana. Este itinerario de formación está compuesto por diferentes aspectos básicos y trata de ayudar a estas personas a redescubrir el sentido de la fe, la persona de Jesucristo, la comunidad de la Iglesia y el regalo de los sacramentos.
Tras las confirmaciones de Aranda y Miranda –estas últimas realizadas el pasado 21 de mayo–, este sábado 3 de junio se administrará este sacramento a los adultos de la capital burgalesa que han estado recibiendo la catequesis específica. La celebración tendrá lugar a las 19:30 horas en la catedral.
El colegio diocesano de San Pedro y San Felices lleva ya 36 años con su pequeña radio escolar en marcha. Una herramienta que utilizan para que los niños puedan aprender diferentes herramientas curriculares: «A los niños les enseña tranquilidad, estar atentos, respetarse los turnos, el querer hacer bien las cosas, preparar un trabajo a conciencia para que luego no salga cualquier cosa. Que salga bien es un fin muy positivo», destaca Cristina Segura, directora de Infantil y Primaria del colegio.
Apostar por esta iniciativa pionera en Burgos vale la pena, porque «hemos visto que funciona, a los niños y a las familias les encanta y es una herramienta perfecta para desarrollar todas las competencias a nivel lingüístico, de comunicación, de aprender a aprender. Hemos tenido casos de alumnos que estaban callados en clase y han conseguido superar esos miedos a través de la radio. Y ya no hablemos en el campo de la expresión de la comunicación de poder hacer debates, de transmitir sus ideas», cuenta Cristina.
Adaptarse a los nuevos tiempos
Tras el parón de la pandemia, les costó un poco poner en marcha de nuevo la radio, pero «hemos empezado a emitir en streaming en enero y estamos empezando a hacer cosillas en esta nueva etapa de la radio», cuenta Begoña López, profesora de Infantil y coordinadora de la radio escolar.
Además del famoso programa «Infantil al ataque» cuentan en su parrilla con otros programas. Han hecho de todo, hasta entrevistar al arzobispo, y siguen apostando por crear nuevos proyectos.
Las emisiones se trabajan en el aula previamente, donde los niños hacen sugerencias y se reparten las tareas. «preparamos el programa, quién va a decir cada cosa, pero también es importante la espontaneidad en la radio, tiene que estar organizado pero tampoco establecida cada palabra que van a decir, porque la espontaneidad es fundamental», explica Begoña sobre cómo se preparan los programas de radio con los niños.
Después de 36 años de trabajo, consideran que «el futuro es muy positivo». Esta radio se ha sabido adaptar a los nuevos tiempos y los alumnos del colegio podrán seguir trasladando al micrófono todo lo que aprenden en clase cada día.
Foto de archivo de una celebración en uno de los módulos del centro.
La delegación de Pastoral Penitenciaria de la archidiócesis de Burgos ha organizado un campo de trabajo del 5 al 8 de Junio. Está dirigido a todas aquellas personas que se sientan interpeladas por esta realidad y quieran tener una aproximación a este espacio, pero especialmente a nuevos voluntarios y estudiantes de Educación Social que ya han tenido algún contacto con esta Pastoral.
El trabajo que se desarrolla desde la Pastoral Penitenciaria va más allá de la celebración de la eucaristía y los distintos sacramentos, abarca un compromiso global de atención a la persona. Conlleva, por tanto, no solo evangelizar sino sensibilizar a las comunidades cristianas y a la sociedad en general. Se trata de humanizar el mundo penitenciario y servir de puente entre la cárcel y la sociedad. En este contexto se plantea este campo de trabajo.
En él se van a abordar las distintas problemáticas que rodean la cárcel y a las personas privadas de libertad, así como las acciones y posibilidades de prevención, acompañamiento y reinserción. El trabajo durante la mañana se centrará en ponencias y mesas de experiencias, mientras que por la tarde se realizará dentro del centro penitenciario desarrollando distintos talleres.
El campo de trabajo comenzará con una reflexión sobre la prevención y las distintas acciones institucionales que se llevan a cabo, de cara a evitar la comisión de delitos y la entrada en un centro penitenciario. Para la segunda jornada, que se desarrollará en el Centro Penitenciario de Burgos, Elena Ramos, directora del centro explicará la visón desde Instituciones Penitenciarias de los distintos programas que se desarrollan en las cárceles con las personas privadas de libertad.
El miércoles, la mirada a la realidad se centrará en el acompañamiento después de la cárcel desde las entidades que habitualmente colaboran en distintos programas en prisión. Para ello, la ponencia correrá a cargo del burgalés Fernando García Cadiñanos, obispo encargado de la Pastoral Penitenciaria en España. El último día, se recogerán las experiencias y vivencias de personas que han tocado de cerca la cárcel y cómo afecta esta situación en el entorno personal, familiar y social.
Aunque para la participación en el total de las actividades –que incluye la entrada por las tardes en el Centro Penitenciario– hace falta inscripción previa, todas las ponencias y mesas de experiencias de la mañana están abiertas a cuantas personas estén interesadas. La actividad se realizará en el Salón de Cáritas en calle San Francisco 8, con la entrada por el parque de Vara, excepto el martes 6, que se realiza en el propio centro penitenciario y será exclusivamente para las personas inscritas. Consulta el programa completo aquí.