San Vitores

Nació en Cerezo de Río Tirón en el siglo IX. Fue sacerdote de su pueblo natal, pero se retiró a una cueva cerca de Oña como ermitaño. Según la tradición se le apareció un ángel que le exhortó a volver a su pueblo, que se encontraba sitiado por los árabes. Volvió, animó a sus gentes y predicó entre los árabes. Le cortaron la cabeza y con su cabeza en la mano, se dirigió a su pueblo, donde fue recibido por sus paisanos, entre ellos unos amigos cuyo hijo acababa de morir y al que Vitores resucitó.

Comentarios

Los comentarios están cerrados para esta noticia.