Testimonios

En este apartado iremos colgando aquellos testimonios de personas concretas que tengan relación con la vida de Marta, con su Causa, así como exhortaciones o gracias recibidas.

E_mail: [email protected]

Dirección postal:
Causa de los Santos - Vicaría General
Casa de la Iglesia
C/ Martínez del Campo, 7 09003 - BURGOS - (España)

  • Testimonios personales

      • Semana Santa 1999 - Montserrat A.

          Me llamo Montserrat A., tengo 43 años, vivo en un pueblecito a unos 18 Km de Burgos, estoy casada, tengo 2 hijos de 20 y 17 años de edad, trabajo en una empresa de Burgos, como coordinadora. Durante un retiro espiritual en el que he asistido este año en “El Brezo”, (Palencia), Adela la directora, después de oír mi historia, me aconsejó que la escribiera, ya que el Papa había pedido a la Obra que recopilara conversiones recientes para darlas a conocer, pero antes de contar mi conversión creo conveniente explicar la causa de ella.

          Mi conversión fue a raíz de la muerte de Marta María de Obregón Rodríguez.

          Antes que nada, quiero aclarar que todo lo que aquí cuento es a través de las conversaciones mantenidas con su madre, de mis propias vivencias y de todo lo que recuerdo que manifestaron, médicos y testigos que declararon en el juicio a su asesino.

          Paso a explicar mi conversión:

          Yo era amiga de su madre, ya que era mi esteticienne desde que yo tenía 17 años, a Marta y sus hermanas las conocía desde pequeñas, pero no había tenido trato con ellas, ya que era con su madre con quien yo más me relacionaba, mi situación espiritual en el momento de que hablamos era “creyente, no practicante” yo estaba bastante alejada de Dios.

          Supe de la muerte de Marta al día siguiente de su aparición, a través del periódico, pedí permiso en mi trabajo e inmediatamente marché al tanatorio donde estaba el cuerpo de Marta y me encontré a sus padres con una profunda tristeza, pero muy serenos, me dirigí a su madre y sin mediar palabra me dijo: “Montse, no sabías nada, ¿verdad?, Pues ya ves lo que nos ha pasado” yo contesté: “No sé qué decir” y su madre respondió: “Reza por ella”. Le pregunté si podía pasar a verla y me respondió “¡Claro que sí, cómo no vas a poder!”, entré a verla y me impactó su rostro, tenía una profunda paz, después de la trágica muerte que había tenido, y se me parecía a una imagen de una Virgen Niña por la dulzura de sus rasgos, después he visto esta misma paz en la imagen de Jesús en la Sábana Santa, curiosamente Marta tenía en su cara un moratón igual que la cara de Jesús.

          Su madre me prometió que no habían tomado ningún tranquilizante y era verdad, estaban serenos, no adormilados.

          Por la tarde asistí con mi hermana al funeral, preparado por el grupo neocatecumenal de la parroquia, un funeral lleno de cánticos de esperanza y alegría.

          Salí de la iglesia y marché a mi casa junto con mi hermana, comentando lo bien que había estado la ceremonia y que se notaba que sus padres eran creyentes por la serenidad que habían demostrado todo el tiempo, todo “muy normal”. Pero a los 2 días de enterrar a Marta, yo me sentía muy mal, no sabía exactamente lo que me pasaba pero yo estaba muy mal y sentía la necesidad de llamar a su madre, a lo que yo me resistía ya que pensaba: ¡Cómo voy a llamarla si hace dos días que ha enterrado a su hija, bastante tiene ya!” pero era tal la desazón que yo tenía que al final, la llamé y le dije: “yo estoy muy mal, no sé lo que me pasa pero estoy muy mal y te tengo que llamar, ya sé que no es el mejor momento pero yo, te tengo que llamar” y ella se echó a llorar y me dijo: “Montse, no sabes la alegría que me das, con 3 personas que reaccionen como tú, la muerte de mi hija estará justificada, mira, el próximo sábado vienes conmigo y te confiesas con el confesor de Marta, él la conocía muy bien y te ayudará.” Yo no entendía nada, pero fue colgar el teléfono y sentir un enorme alivio, como si me quitaran un peso de encima.

          También tengo que decir que en los días anteriores de llamar a su madre, tuve un sueño que me llamó poderosamente la atención: “Yo estaba debajo de la caja de Marta, bañándome con su sangre y todo mi afán era lavarme y frotarme.” Este sueño lo comenté con mi hermana y ella a su vez a un sacerdote, el cuál le dijo que Dios también se manifiesta a través de sueños, aunque ella prefirió no decirme nada en aquellos momentos y esperar a ver cómo actuaba yo.

          El sábado siguiente, fui con ella a confesar y hablar con el sacerdote de Marta, y a partir de ahí mi vida ha cambiado por completo.

          Empecé a confesar con regularidad, a llevar un plan de vida de oración, este mismo año asistí a mi primer retiro espiritual.

          Poco después de la muerte de Marta ascendí en mi trabajo, lo cuál estuvo a punto de costarme mi matrimonio ya que yo tenía que dedicar muchas horas para aprender mi nuevo trabajo y sólo aparecía por casa para dormir. Cuando ya estaba todo a punto de romperse, asistí a mi primer retiro, gracias a ello las cosas empezaron a cambiar, durante los 4 días de mi retiro Dios me hizo ver muchas cosas y me preparó para el “panorama” que me esperaba en casa, con mucha paciencia, algo poco habitual en mí y que Dios me está enseñando a tener poco a poco, mucho cariño y dulzura por mi parte al principio, poco a poco las cosas han ido cambiando, hasta el punto que hoy es el día que estamos más enamorados y unidos que nunca y esperamos con ilusión los 25 años de casados para renovar los votos.

          Mi marido es buena persona, tiene buenos sentimientos y es muy trabajador y muy casero, pero está alejado de Dios, yo siempre digo que él no está con Dios, pero Dios sí que está con él, siempre vamos juntos a todos los sitios, excepto cuando se trata de temas de religión, él acepta que yo vaya a Misa todos los domingos, pero no acaba de entender que me marche de retiros, con el tiempo va cambiando, pero éste ha sido el primer año (después de 6 años ) en el que al regresar del retiro le he encontrado alegre y contento. Posiblemente no sepa muy bien por qué, pero sí que ha visto que de unos años a esta parte, somos más felices. Igual que con los retiros ocurría cuando yo debía de ir a hablar con mi Director Espiritual, D. Ricardo (Penitenciario de la Catedral de Burgos), cuando llegaba a casa, enfado y “morro”, poco a poco lo ha ido aceptando aunque no le gusta.

          También he de decir que con respecto a mi familia, mi marido tenía auténtica aversión a mi única hermana y a su marido, pertenecientes a Comunidades de Vida Cristiana y personas también muy religiosas, que han aguantado muchas malas caras y desplantes durante muchos años sin ningún motivo, yo he sufrido muchísimo todas estas situaciones pero desde el primer momento he pedido y sigo pidiendo ayuda a Marta, y hoy es el día que sin haber ocurrido nada especial, no sólo les quiere, sino que continuamente me pregunta y cuenta con ellos para todo, hace de esto dos años y todavía no lo puedo creer.

          A mis dos hijos les apunté, el mismo año de la muerte de Marta, a Montauca (Club de chicos de la Obra) con la disculpa de que iban a estudiar, pero lo cierto es que yo pretendía “otra cosa”.

          El mayor se marchó del club al poco tiempo, a causa de un malentendido, pero he de decir que siempre ha sido un “angelote” y lo sigue siendo, a sus 20 años es un chico muy sensato, apenas sale de noche, y es muy dócil, Dios también esta con él.

          El pequeño ha seguido en Montauca hasta el año pasado, actualmente tiene 17 años, siempre ha sido un chico muy inteligente y vivo, que ha traído “mártir” a su hermano, un niño muy bueno en el colegio e insoportable en casa, superinteligente y con una capacidad increíble para hacer daño con sus palabras, las cuales no escatimaba para nadie. Desde que empezó a ir a Montáuca ha cambiado muchísimo en su actitud, yo le observo a veces cómo se domina y aguanta, otras veces no, por supuesto, pero no es ni su sombra, limpio, aseado, siempre impecable, apenas sale por la noches, un chico que todos los domingos se levanta a las 10 de la mañana para asistir a la única Misa que hay en el pueblo, si ha trasnochado (viendo películas o jugando con la videoconsola), cuando acaba la Misa, vuelve a dormir. Si tiene algún partido de fútbol el domingo, el sábado por la tarde me pide que le baje a Burgos para oír Misa.

          No hace falta decir, que a mi marido y a mis hijos llevo encomendándolos a Marta desde el primer día de mi conversión.

          Hay algo muy significativo que siempre me sucede, y es que cuando voy a un retiro, sin yo pensar en ello, siempre, siempre sale a relucir Marta, allí donde he ido he acabado dando testimonio de Marta, ya el primer año de retiro, en Palacios de Benaver, conocí a una señora, se llamaba Pilar y tenía una hija que se llamaba Marta, Pilar estaba en la hospedería y buscaba unos días de tranquilidad ante el problema que tenía en casa, su hija había sido madre muy joven y era una chica muy problemática y rebelde, se había marchado de casa a causa de los continuos enfrentamientos que tenía con su padre, y su madre estaba desesperada. Yo le hablé de Marta y me dijo que iba a pedirle por su hija. Hace años que perdí el contacto con Pilar pero las últimas noticias que tuve eran que su hija había vuelto a casa y estaba a punto de casarse.

          Al año siguiente volví a Palacios de Benaver y allí conocí a Claudio y M. Isabel, un matrimonio mayor que cada vez que tienen un problema, me llaman para que les encomiende a Marta.

          Otro año durante un retiro en el convento de las Bernardas en Burgos, también les hablé de Marta, quisieron conocer a su madre, comentaron que no tenían vocaciones y que se las iban a pedir a Marta, cuando llamé al año siguiente me dijeron que tenían 2 novicias nuevas.

          También, otro año durante un retiro en el convento de las Benedictinas de San José, conocí a Sor Orieta una “fan” incondicional de Marta desde su muerte.

          Hace 2 años durante una semana de Ejercicios en la casa Cristo Rey de Pozuelo, dirigidos por Carlos Landecho, una tarde haciendo oración en la iglesia, sentí que tenía que hablar de Marta, tuve que salir a pasear por el patio, completamente desquiciada, ya que estábamos en absoluto silencio, afortunadamente llegó la hora de la merienda y “qué casualidad” se sentó Carlos a mi lado, yo no pude evitar hablarle de Marta.

          Al día siguiente durante mi tiempo de entrevista con Carlos le comenté: “Carlos, perdona por haber roto el silencio ayer durante la merienda, pero yo tenía que hablar de Marta, es superior a mí” y Carlos me respondió : “Montse, ¿tú quieres hablar de Marta?”, yo contesté: “No quiero hablar de Marta,  tengo que hablar de Marta” y me dijo: ¿Te atreves a hablar de Marta delante de todos?, respondí: “Sí, por supuesto”, “Pues hoy vas a dar tú la hora de instrucción de 13:00 h a 14:00 h y hablas de Marta”.

          Así fue, puse la foto de Marta encima de la mesa y pasé toda la hora contando cosas de Marta, tranquilamente, y hasta pude recordar la carta que escribí a su asesino, 5 años atrás.

          Quedaron todos muy impresionados, incluso Carlos me pidió que hablara de Marta a un grupo de sacerdotes de toda España que tenían una convivencia en Cristo Rey, pero el jefe del grupo no creyó oportuno que lo hiciera.

          Carlos me comentó que todo esto de Marta había que darlo a conocer, que le enviara toda la documentación posible (fotos, citas, etc.) y que él organizaría una reunión para que fuéramos, su madre y yo a Madrid para hablar de Marta. Recopilé toda la documentación que pude, y se la envié.

          Pasó todo el año siguiente y al volver a los Ejercicios, Carlos me dijo que no había olvidado la charla de Marta y que ése mismo año, en Octubre o Noviembre la iba a organizar, y allá que fuimos su madre y yo a “hablar de Marta” a la casa Cristo Rey, al final de un retiro y ante las personas que asistieron a él.

          Este año, tenía claro desde el principio que “tocaba” ir al retiro con su madre, al Brezo, (hacía años que ella me lo proponía, pero yo no “debía” ir) y allí fue donde me han propuesto escribir todo esto.

          Tengo que decir que todo lo que me pasa es de repente, yo no voy a ningún retiro pensando en Marta, pero siempre surge y es que Marta es “la leche” ya en este mundo era muy impulsiva y lo sigue siendo y a mí me vuelve loca, ¡bendita locura!, cuando he de hacer algo tiene que ser en el momento, por ejemplo: Cuando Carlos me pidió que le enviara la documentación de Marta, no paré ni dejé tranquilo a nadie hasta recopilarla y enviarla, después ya me quedé tranquila y no me preocupé para nada de la charla que Carlos quería organizar.

          Mi relación con el caso de Marta es muy, muy especial, de lo cual me alegro, aunque cumplir lo que me piden a veces me cueste algún disgusto o bronca en casa, ya que mi marido no lo entiende, ni siquiera lo sabe, pero ante esto no me detiene nada, Dios me está “tratando muy bien” y es tanto mi agradecimiento que sólo puedo ponerme a su disposición en todos los aspectos, tengo claro que mi medio de santificación es mi familia y mi trabajo y ahí es donde me muevo, intento dar un testimonio de vida y hacer el apostolado que puedo, pero ante lo de Marta no me detiene nadie, si tengo que ir con su madre a algún lado, lo dejo todo y voy, aunque me cueste alguna bronca, pero Él es lo primero e intento ser lo más dócil posible.

          Después de la muerte de Marta han sucedido una serie de cosas, cuanto menos “extrañas”.

          La primera fue en el tanatorio, se presentó un sacerdote que no conocía, ni a Marta, ni a sus padres, D. José, canónigo de la Catedral de Burgos, estaba desayunando y “sintió” que debía ir, cuando vio el rostro de Marta se arrodilló y al preguntarle su madre si iba a rezar un responso respondió: “No, vengo a encomendarme a ella”.

          Poco tiempo después recibieron una llamada de la revista “Interviú”, querían hacer un reportaje sobre lo sucedido, sus padres aceptaron, con la condición de que fuera un reportaje limpio, sin morbo y supervisarlo antes de su publicación, así se hizo, y por medio de su publicación recibieron varias cartas de presos a los que les ha impactado Marta. Hace poco tiempo, su madre recibió una llamada del periodista que hizo el reportaje, comunicándole que había dejado “Interviú” y estaba trabajando en la “Cope”, poniéndose a su entera disposición para lo que necesitara.

          También, poco después de la muerte de Marta, recibieron una llamada de una cadena de televisión desde Miami, tenían previsto venir a España para hacer un reportaje sobre la Expo de Sevilla, se habían “enterado” de lo de su hija y querían incluir su historia en un programa del estilo de “Informe Semanal”, ellos accedieron y el reportaje se hizo, grabaron una entrevista con sus padres y vídeos de Marta. Mientras recogían todas las cosas, su madre se encontró al presentador del programa llorando, sumamente afectado frente a una foto de Marta, y al preguntarle ella qué le pasaba, le contestó: Señora, no he podido evitarlo, mire usted que estoy muy acostumbrado a hacer reportajes de este tipo, pero esta chica me ha impactado especialmente.

          Más o menos a los 2 años de su muerte, se presentó en su casa la hermana de una amiga de Marta para comunicarles, que ingresaba en el convento de las Clarisas, el motivo era, que le había pedido un novio a Marta, y esas fueron sus palabras: “Marta, búscame un novio, que no me como una rosca”, “y mira qué NOVIO me ha buscado”.

          También he de decir que han recibido cartas de misioneros desde Sudamérica pidiéndoles “estampas de Marta”, y no sabemos nadie cómo se han enterado.

          Como anécdotas curiosas he de anotar que la noche en que Marta murió, saltaron las alarmas de su iglesia, San Martín de Porres, sin ningún motivo aparente. También esa misma noche en Misa, una amiga de su madre le había pedido a Santa Inés una mártir de nuestros tiempos, ejemplo para la juventud, que tan poco valora la pureza.

          Terminaré diciendo que “curiosamente”, las hermanas pequeñas de Marta se han enterado de su trágica muerte, años después, cuando sus padres han creído conveniente decírselo, a pesar de que fue una noticia muy comentada en Burgos.

          No quiero terminar sin mostrar todo mi agradecimiento y admiración a su madre, una auténtica “madre coraje”, aparentemente, se la ve fuerte, dando ánimos y consolando a los que sufren, pero nadie sabe que cada día ha de pedirle a Dios su gracia para poder soportar el dolor que tiene y que sólo encuentra consuelo cuando ve a la Virgen a los pies de la Cruz.

          Una madre a la que sus hijas nunca han visto llorar y que cuando una de ellas le comentó que jamás iba a poder perdonar al asesino de su hermana, le respondió: “Tienes que perdonar, sino, nunca más vas a poder rezar el Padrenuestro”.

          Una madre a la que he visto tranquila y serena, con un rosario entre las manos, durante el juicio al asesino de su hija, oyendo las barbaridades que la hicieron y que en los peores momentos, solamente se la veía llorar en silencio.

          Una madre que dice, que tiene 4 hijas y una está en el cielo. Una madre dispuesta a contarme todo lo necesario sobre su hija, a ir conmigo a donde yo le pida, por muy doloroso que le resulte el hablar de tan malos momentos (aunque ella los lleva siempre en su corazón), siempre dispuesta a darme fotos, documentación, etc … sobre su hija, y que confía plenamente en mí sobre algo tan delicado. Yo pienso que ella sabe que no es “cosa mía” y al igual que yo, “se deja llevar”.

          Una madre que cuando ha dado alguna charla ha dejado a los asistentes tan impresionados como su propia hija, de esto pueden dar fe las monjas del Convento de las Bernardas de Burgos, Carlos Landecho y el Hogar de Santa María en Burgos.

          Para terminar he de decir que espero que esto sirva para alguien, confío plenamente en la discreción de las personas que vayan a leerlo ya que lo que aquí he escrito es muy personal y que como dice su madre, le demos mucho trabajo a Marta, que para esto está en el Cielo.

          MARTA, RUEGA POR NOSOTROS.

      • Junio de 2007 - Carta a Marta de los Ángeles

          Marta de los Ángeles, 

          ¡Quién iba a decirme Martucha, cuando le entregué mi testimonio al Sr. Arzobispo, toda la “movida”

          que nos tenías preparada!

          Por otra parte, no debería de sorprenderme, conociéndote como te conozco, como siempre tenaz, impulsiva y persistente hasta conseguir tus propósitos.

          Recuerdo a tu madre, mirando hacia el Cielo y diciendo “Hija mía, ya sé que querías ser famosa, ¡pero no así!”. Y es que nos vuelves locos a todos. ¡Bendita locura!

          Te imagino aburriendo a Papá Dios con tus intercesiones, etc, etc… y a Él, incapaz de negarle nada a “la niña de sus ojos”.

          Cuando el Señor te enamoró y te entregaste a Él hasta el final, tus esquemas cambiaron y entre otras cosas querías un periodismo más limpio.

          Pronto comenzaste a trabajar y le tocó al periodista de Interviú que publicó el caso de tu asesinato (martirio), y pasado un tiempo llamó a tus padres para decirles que estaba trabajando en la Cope, poniéndose a su entera disposición.

          También a través del periodismo tocaste el corazón de muchos encarcelados que te conocieron a través de Interviú y escribieron a tus padres unas cartas excepcionalmente emotivas.

          También tendría algo que decir el periodista de la cadena de televisión americana, que aprovechando el viaje a España para hacer un reportaje de la Expo/92, (todavía no sabemos cómo se enteró de tu caso), entrevistó y grabó a tus padres en tu casa y al que tu madre encontró llorando ante una foto tuya completamente afectado.

          Tu historia de Amor con el Señor llega mas allá que todo esto, la amiga que te pidió un novio y está en el convento de las Clarisas, Dani que en el plazo de un mes pasó de ser un adolescente rebelde e insufrible a ingresar en el Seminario, la Hnas. del Convento de las Bernardas que pidieron tu intercesión y en un año ingresaron 3 novicias nuevas.

          Parece ser que los jóvenes y los periodistas están en tu punto de mira especialmente y no me extraña, ya que tú eres una periodista joven y moderna.

          Sabemos que tienes ganas de trabajar y de paso nos “pones la pilas” a todos a los que el Señor a elegido para que seamos tus instrumentos en este mundo, yo me siento en deuda con Él y contigo, mi vida ha cambiado desde que la gotita de tu sangre por medio de la Comunión de los Santos me salpicó, transformó mi vida y me enamoró de Él y de ti, sé que siempre estáis conmigo y no puedo por menos que ponerme a vuestra entera disposición para lo que gustéis mandar.

          Marta, intercede por todos nosotros, tus padres, hermanas, nuestras familias y especialmente por toda la juventud, para que encuentren el verdadero camino de la felicidad.

          Marta de los Ángeles, ruega por nosotros.

          Con todo mi amor,

          Montserrat

      • Junio 2008 - Daniel G.

          Burgos junio 2008

          Hola!, soy Daniel y tengo 17 años. Yo conocí a Marta sin saberlo porque tras una situación en mi familia de la que soy protagonista por los problemas que les he dado a mis padres, fui encomendado a Marta -yo desconocía totalmente esta situación-, y ese mismo verano ingrese en el seminario. 

          Acabando mi primer año en el seminario se me presentó la oportunidad de conocer a Marta a través de la biografía que me dio uno de los formadores. Yo sabía la situación de Marta por cercanía a la familia pero desconocía totalmente los procesos que se están llevando ahora, tras este año yo me acerqué a conocer un poquito más de cerca la situación de Marta y la verdad es que siempre que la he pedido ayuda nunca me ha fallado, la selectividad, exámenes, pedir por gente, ayudarme a mejorar como persona… la verdad es que estoy muy agradecido.

          Muchas gracias

          Daniel G .

      • 26 de febrero de 2008 - R.Z.

          Muy señores míos:

          Les voy a relatar un favor que atribuyo a la intercesión de MARTA OBREGÓN RODRÍGUEZ. Una de is hijas, se fue a vivir con uno de los chicos de su pandilla - no eran novios siquiera - ; nos llevamos un gran disgusto, pues no era una chica "casquibana" y habíamos procurado darle una formación moral y human como padres responsables.

          A ella le dijimos que, aunque nos disgustaba su comportamiento, seguíamos siendo sus padres y, que en nuestra casa le seguiríamos acogiendo a ella. Por cierto, siguió viniendo a comer cada día pues le quedaba más cerca de su trabajo y se lo encontraba preparadito.

          Cuando le preguntaba si pensaba casarse, me decía que no pensaba tal cosa, y como eran mayores vivían su vida.

          Me enteré de la historia de Marta y recurrí a su intercesión: "Si tú has sido capaz de dar tu vida por la vida por defender tu PUREZA, intercede por mi hija para que deje esta situación".

          Hacía unos días que le rezaba, creo que no fueron ni semanas, cuando mi hija nos comunicó que se casaban en unos meses. Tenían ya fecha, iglesia y preparados para hacer los cursillos prematrimoniales (por poco me desmayo). Se confesaron antes de la boda... y fue una ceremonía muy bonita.

          Hoy tienen una parejita, uno de tres años y otra de uno, que son la alegría de todos.

          Para mí este suceso, tien algo de extraordinario, y lo hizo posible la intercesión de Marta.

          Este es mi testimonio para la causa de su beatificación.

          Un cordial saludo,

          R. Z.

      • 28 de julio de 2008 - Jóvenes San Pedro Apóstol - Buñol (Valencia)

          Esta mañana, un poco libre para mi, gracias a Dios, he estado leyendo un artículo que encontre ayer en el periódico “El Mundo”, sobre el caso de la muerte de una joven llamada Marta. Se decía de manera correcta, que comenzaba el proceso y estudio de su vida, llamándola sierva de Dios, precioso nombre por cierto. Entre otras cosas, aparecía esta pagina web:

          http://www.causademarta.net y movido por la curiosidad, la estoy leyendo. Primero una ojeada, pero al final, la estoy devorando, (ya lo notareis por lo largo de este articulo). Interesante os la recomiendo. Y es que me esta gustando contemplar, como en una vida normal y corriente, es más, con un final trágico, se pueda encontrar la grandeza del amor de Dios, y la lucha, la tensión, que no el agobio, del que busca y encuentra, cumpliéndose aquella petición que muchos hacemos en la Plegaria IV de la misa:  “Y ahora, Señor, acuérdate de todos aquellos por quienes te ofrecemos este sacrificio... ...y de aquellos que te buscan con sincero corazón”.

          Cuantas cosas normales, pero extraordinarias aparecen en la vida de esta sencilla joven. Me gustaría destacar alguna de ellas. Marta creció en el seno de una familia cristiana. Llega el tiempo de las turbulencias y pierde esa relación primera e infantil con Dios que había visto y aprendido en casa. (cuantas vidas paralelas, se pueden leer en la vida de Marta, ¡Dios mío!). Continuo. Tuvo sus “rolletes”. Juventud divino tesoro, que al ser manoseado, no siempre por maldad, si, casi siempre, por ignorancia, no solo va perdiendo el valor..., mas aún es motivo de tantos conflictos y de tantos desprecios. (¿Como no se da cuenta este mundo que, aquello que, con tan acierto se viene llamando pecado, no es algo simplemente malo o prohibido sino es aquello que nos hace esclavos, nos deshumaniza y nos mata poco a poco o rápidamente?.

          Separados de Dios, nada podemos, nada somos, que verdad tan grande). Marta tuvo unencuentro personal con Cristo, en el silencio, en la compañía de muchísimos jóvenes, en los montes y precioso lugar de oración: Taize. Como he oído decir, es un lugar muy parecido a la fuentes que pueden encontrarse en medio del peregrinar: te paras, bebes y continuas... Así lo vivió también Marta. Aquella había dicho un día a su madre:  "no te preocupes tanto, déjame que tropiece, que ya me levantaré…". Pero está claro Dios estaba interesado en esta chiquilla alegre y poco tiempo después escribirá estas letras a una amiga:  "Me encuentro en Taizé, en la frontera franco-suiza, en una especie de "campamento" maravilloso, constituido por unas 6.000 personas, pero son gente cargada de ganas de vivir, que tiene como punto de unión a nuestro Dios, y que venimos a pasar una semana, de domingo a domingo… Es curioso, pero cuando descubres algo importante en tu vida, y caes en la cuenta de cosas fundamentales que hasta entonces pasaron inadvertidas a tu lado, te encuentras francamente bien, en paz, y… bueno, creo que sabes lo que te cuento. Todo ser humano, que se plantee el sentido de la vida y cosas alrededor de éste, pasa por esta etapa de la que te hablo. Sé que tú estás en camino, igual que yo y que la mayoría, y creo en ti, por otra parte. Así que, sólo pensando, analizando con tranquilidad, descubrirás cosas maravillosas que nunca pensaste existieran. La vida es genial, Cris, y te escribo porque sé que tú piensas igual. Después de la tormenta, siempre viene la calma".

          Otra cosa que quisiera destacar, es como en la Iglesia, Dios se vale de tanta gente buena, anónima, también siervos de Dios. Marta conoce a Dios en su casa. Crecerá su conocimiento en un Centro del Opus Dei. Dios no la abandonará (aunque ella dijera "no querer saber nada de Él), a través de: Amigos, Residencias de Estudios, Campamentos, Sacerdotes, Camino Neocatecumenal. Que grande y preciosa es nuestra madre la Iglesia ¡Dios mío!: ¡Gracias por este invento de tu Misericordia, Señor!.

          No quiero terminar sin contar lo que más me ha ayudado al leer todo esto. Verdaderamente lo que cambió totalmente a Marta, fue su experiencia de la Misericordia de Dios. Aquel día que estaba escrito en el libro de la Vida, y que solo sabe Dios, en su infinito amor por sus hijos; arriba de un coche, en una tarde cualquiera, -preciosa la simplicidad y grandeza de todo lo que aconteció-, comenzó a relatar, a un sacerdote itinerante, sus miedos, sus cruces, sus sufrimientos, sus pecados. Que precioso lo que se cuenta y que tantos hemos vivido. De aquel encuentro tan Divino-Humano, salió corriendo, llena de alegría, gritando que era Verdad, que Dios la Amaba y no la había olvidado nunca. Esto creo que es lo principal de esta Historia, por eso aquí me detengo, esperando que también a vosotros os pueda servir como a mí.

          Le he tomado cierto cariño a esta tal Marta, que por cierto, mañana será su santo. Puede que un día, no muy lejano, también la Iglesia crea conveniente que brille esta “niña”, en medio de este Pueblo de Dios, para la vida del mundo, que auque lleno de personas pobre, y débiles, sigue siendo mimado por la Belleza y la Bondad de Dios.

          Para más información: 
          http://www.causademarta.net y http://grupodejovenes.blogcindario.com/

      • 28 de julio de 2008 - San Pedro Apóstol - Buñol (Valencia)

          http://www.causademarta.net/
           

          En esta sencilla web encontraremos el testimonio de una Joven Cristiana que dió su vida en defensa de su castidad. En ella descubrimos una gran evolución en su adhesión a Jesucristo. Marta es un testimonio para los jóvenes de hoy y una puerta de esperanza intercesora para aquellos padres y abuelos que sienten la necesidad de rezar por hijos y nietos que caminan a espaldas de la verdad, a espaldas de Cristo.


          Unos cuantos regalos de la Vida de Marta...
          - Desde "Taize escribia": “ Es curioso, pero cuando descubres algo importante en tu vida, y caes en la cuenta de cosas fundamentales que hasta entonces pasaron inadvertidas a tu lado, te encuentras francamente bien, en paz, y… bueno, creo que sabes lo que te cuento. Todo ser humano, que se plantee el sentido de la vida y cosas alrededor de éste, pasa por esta etapa de la que te hablo". - En tiempo de sufrimientos, Una amiga, Sonia, que murió en 1998, le decía: "hayas hecho lo que hayas hecho, Dios te quiere", "Dios, como Padre, te sigue queriendo como tú eres". Marta subía frecuentemente con sus amigas a una casa de campo y, unos días después, la familia tenía visita de un sacerdote del Camino Neocatecumenal, y las hermanas la invitaron también a ella. A media tarde, el sacerdote D. Ángel Bello se despide para que pudieran recoger, y dice a Marta que, si quiere, él la puede bajar a Burgos en su coche. Don Ángel, conforme a la apreciación de un párroco, es hombre abierto e inteligente, con una buena preparación pedagógica, que, antes había sido Salesiano de la Inspectoría de Valencia. En cuanto Marta se vio sola comenzó, en su acostumbrada franqueza, a manifestarle el conflicto que la oprimía por dentro. Este sacerdote itinerante la escuchó con atención y, al final (según las amigas), le pregunta que si tiene algún otro pecado o falta que añadir para disponerse a recibir el perdón. Ella queda sorprendida, sintiendo que lo que le decía Sonia era verdad y se le llena el alma de alegría. Una paz, que jamás querrá perder. En cuanto baja del coche, corre de nuevo a la casa de sus amigas, que también habían regresado, dando saltos y gritos de alegría, para decirles que sabía que Dios no la había olvidado. Poco después les pide que la presentasen en las Comunidades, porque ella también quería conocer el "Camino".  "Quería dar a Dios todo en gratitud, al sentirse perdonada". - Era una chiquilla alegre, muy vital, sigue diciendo esa compañera. Recuerdo cómo a las 21,30, de regreso a la residencia nos situábamos a veces, en la acera contraria y llamaba a una de sus amigas para que se asomara a la ventana y en plena calle se marcaba un zapateo con palmas y todo… Era feliz, estaba muy enamorada de su novio Javier y el motivo de salir corriendo de las catequesis era porque quería llamarle dentro de los horarios permitidos por la residencia, y contarle lo que en ese día había tratado la catequesis. Hasta tal punto quería hacerle partícipe, que en más de una ocasión, grababa las catequesis… para que Javier de algún modo y a distancia también lo viviera. - En una ocasión, al salir de la parroquia de San Martín de Porres, se encontraban charlando el párroco, D. Fermín con D. Pedro Gutiérrez, también sacerdote, que había sido su antiguo profesor de Religión en el Instituto. Se acercó éste a Marta para interesarse por sus proyectos de afamada periodista en que, él sabía, quería convertirse, según relataría el párroco a sus padres, y que Marta, tras unos instantes de reflexión, le contestó:  "hoy por hoy en mi cabeza solo cabe Dios.  La verdadera y única paz se encuentra en Dios, y todos estamos de paso en esta vida". - Marta dejó varias notas y reflexiones esparcidas por sus cuadernos, de las que recojo una: "Oh Dios: ayúdame, por favor, ¡ya! (Que no hay tiempo, Señor…, que la vida es muchísimo más corta que lo que, pobres ilusos, pensamos. Que cuando tú quieras nos coges y nos llamas de este suelo en que nos ha tocado vivir). Ayúdame pronto a encontrarme. Ábreme bien los ojos y mi corazón, porque parece ser que todo aquél que nos rodea eres tú mismo, y eso, Dios mío, cuesta muchísimo entenderlo. Sólo una cosa más: que sepas que te quiero y que siempre lo he hecho, a pesar de todo".


          Oración Para La Devoción Privada
          Señor Jesús,
          que hiciste de la joven Marta
          un ejemplo de vida alegre y generosa,
          y la fortaleciste en el amor humano
          y en la defensa de su castidad;
          concédeme, por su intercesión,
          el favor que ahora te pido...  (pídase)
          Padre Nuestro, Ave María y Gloria.


          Tanto más Confío y me abandono 
          en Él, cuanto me siento libre. (Marta)

          Tags:  JóvenesActualidad

      • 27 de julio de 2008 - Juan Vicente

          Hola. Estoy casado y tengo una hija de 24 y un hijo de 23 años. Cuando estaba leyendo la causa de Marta estaba pensando con mucho dolor, en la fidelidad que le ha tenido al Señor, hasta dar su vida por Él. Tomemos ejemplo de Marta y seamos fieles toda nuestra vida. También soy supernumerario, rezaré y la tendré presente en mis oraciones. Un abrazo.

      • 28 de julio de 2008 - Diego Z.

          Hola soy un sacerdote de 34 años de la diócesis de Coria-Cáceres. Me ha impresionado mucho esta historia de Marta que desconocía por completo. Os animo a que sigáis adelante con esta causa. Es un testimonio muy actual que puede hacer mucho bien a la juventud de hoy. Rezo por todo esto y para que Dios glorifique a esta sierva suya para el bien de la Iglesia.

      • 29 de julio de 2008 - Carlos D. (Sacerdote)

          Ayer, domingo 27 de Julio de 2008, leyendo el suplemento crónica del diario el Mundo, me sorprendió, me impactó, no sé cómo explicarlo, pero el artículo sobre nihil obstat de la Santa Sede para que Marta Obregón llegue a los altares me llamó la atención. Al principio, a decir verdad, por un poco de curiosidad, pensé que se trataba de alguna historia en la que de una forma o de otra se ridiculizaba a la Iglesia. ¿Una chica, atractiva, muy guapa, con unas cualidades excepcionales, camino de los altares porque murió forcejeando con su agresor en un intento de violación? He de confesar, como he dicho antes, que la cosa tenía su morbo. Pero a medida que leía el artículo me daba cuenta de que estaban contando la vida, con sus luces y sombras, de una joven de 22 años que saboreó como todos deberíamos hacerlo el amor de Dios. Tenía ilusiones, ambiciones, proyectos, etc..., bien lo sabe la directora del Centro del Opus Dei donde iba a estudiar. Era una chica de nuestro tiempo como se dice ahora; pero tenía algo más había vuelto a encontrar el amor de Dios, que nunca la abandonó, y para no alejarse nunca de Dios llevaba dirección espiritual con el sacerdote del Centro. 

          Si en todo lo escrito alguien se ha molestado u ofendido le pido perdón, no es esa mi intención, escribir no se me da bien, sino que pretendo poner de relieve que en los planes de Dios, aunque nosotros no los entendamos, Marta tenía que dar un testimonio de castidad en grado heroico en una sociedad en que lo que importa es pasarlo bien, dar rienda suelta a tus instintos y “viva la Pepa”; por lo menos es lo que nos quieren hacer creer. Por lo que he leído, Marta no era así, tenía las ideas claras, una formación cristiana envidiable, lo mas importante, era una mujer enamorada. Como es lógico y normal tenía un amor en la tierra, pero también un amor con mayúscula. Los pies en la tierra, la cabeza en el cielo; y como decía San Josemaría Escrivá, amaba a Dios y a las criaturas con el mismo corazón.

          Me llamo Carlos Dolz, soy sacerdote, pertenezco a la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz y Opus Dei, estoy incardinado en la diócesis de Segorbe-Castellón, y he confesar que desde que leí el artículo no he dejado ni un momento de pedirle a Marta que nos ayude a los sacerdotes a vivir enamorador de Dios, porque ese es el secreto para vivir en castidad, en mi caso el celibato sacerdotal, que no es una carga, sino alas para volar muy, muy alto.

          Querida Marta:

          Sé que estás gozando de la visión de Dios, de su misericordia. Tú has encontrado lo que tanto le pedías, y ahora gozas de la plenitud de su amor. Gracias por el testimonio que nos dejado. Sé que oyes lo que te pedimos y que nos miras desde el Cielo con el mismo amor y el mismo cariño con que lo hace Dios.

           Llevo la foto de tu estampa en la agenda electrónica, y cuando la miro me digo: "tú fuiste fiel, ayúdanos a ser fieles"

          Castellón 28 de Julio de 2008.

          Carlos D.

      • 31 de julio de 2008 - María del Mar de I.

          ¡Hola! Soy una madre joven, tengo 25 años y tengo dos hijos pequeños. Soy también del camino neocatecumenal y un hermano me pasó por email esta causa...

          Tengo que agradecerle a Dios un ejemplo tan maravilloso, de valor a la hora de fiarse de Dios y defender lo que hoy en día es moneda de pago para todos los jóvenes, a la hora de buscar afectivismos y cariño. Lo que no saben, y lo que yo tampoco sabía hace unos años, es que eso no es amor, no es más que un pozo sin fondo... El verdadero amor es Dios y sólo en la Iglesia uno puede caminar hacia Él.

          Nunca, tengo que confesar, que he sido muy santera, ahora en la oración matutina estoy descubriendo algunos santos, sus vidas, pero cuando hoy me llegó la historia de Marta, algo en mi interior me hacía devorar todas las secciones de la página. Ha sido para mí un apoyo grandísimo y una manera de entender la misión de los Santos.

          Espero que cuando mis hijos estén más mayorcitos, esta historia, esta profesion de fe les llene tanto como a mí hoy. Gracias por luchar para que el mundo conozca a esta chica y su historia. Yo no seré quien se quede callada, también la divulgaré para que los jóvenes sean valientes y se entreguen al amor de Dios.

          María del Mar

      • 4 de agosto de 2008 - Beatriz Mercedes B.

          Acabo de conocer la causa de Marta. Soy periodista de 71 años, viví en España 13 años y creo que el favor recibido es poder compartir con esa colega joven su vida y su tránsito violento a la Eternidad. Quiero encomendarle a ella una situación familiar - un hermano, su esposa y sus dos hijos- que atraviesan un momento muy duro y difícil. Y pedirle porque la juventud aprenda de ella el valor de la dignidad humana, lo formidable que es entregarse a Dios y compartir, por la Comunión de lo santo y de los santos, el gozo de vivir con Jesús en la Iglesia católica.

          Beatriz Mercedes B.

      • 4 de agosto de 2008 - José Vidal L.

          Recien abrí esta página, desconocía por completo este caso. Desde hoy me adhiero en espíritu a esta causa, desde ya rezaremos como familia para que pronto tengamos oficialmente una santa MODERNA. 

          José Vidal L.

      • 4 de agosto de 2008 - Ivi M.

          Más que consulta, doy gracias a Dios por haber encontrado el testimonio de vida de esta jovencita española que vivió intensamente su vida en Cristo y murió trágicamente defendiendo su castidad, aunque al igual que Cristo, lo trágico de su martirio se transforma en una victoria sobre la muerte, el pecado y el mal pues ese evento ha permitido que muchas personas (como yo), conozcan la historia ejemplar de una joven de este tiempo, que descubren o quizás redescubren el inmenso amor y misericordia de Dios para sus criaturas y una vez conocido no quieren dejarlo jamás. Veo con júbilo que el llamado a consagrarse a la itinerancia que Marta descubrió en el camino neocatecumenal no pudo truncarse ni siquiera con la muerte, porque ella aún desde el cielo da testimonio con su propia historia del amor de Dios aún en la adversidad. Sinceramente espero que esta niña tan tierna, tan amada por Dios y llena de virtud, alcance algún día un lugar en los altares y que se siga difundiendo su historia a todas las naciones en la fidelidad a su vocación misionera que con tanto éxito cumple desde el cielo. Ruega por nosotros Marta Obregón que nosotros pobres pecadores también rezaremos por tu causa que es causa de tu amado Cristo.

          Ivi M.

      • 7 de agosto de 2008 - Laura J.

          Marta mira a todos los jovenes del mundo, especialmente por los alejados de Dios, y que tú con tu testimonio de vida seas la mirada que los conduzca al encuentro con Dios. Ruega por nosotros. Amén Yo quiero dar a conocer el testimonio de Marta, ayúdame Padre, en nombre de tu hijo Jesuscristo. Amén.

          Laura J.

      • 14 de agosto de 2008 - Ángel Bello (Sacerdote) - I

          SOY EL SACERDOTE-ITINERANTE DEL C.N.C. RESPONSABLE DEL CAMINO EN PORTUGAL- QUE DIOS PUSO EN EL CAMINO DE MARTA EN EL MOMENTO DE CRISIS DE SU VIDA. NOS ENCONTRAMOS EN SAN MEDEL CON LAS HERMANAS ESTELA Y SONIA [...]. DESPUÉS DE UNA AMENA CONVERSACIÓN SOBRE LOS PLANES QUE DIOS TIENE SOBRE NUESTRAS VIDAS, SINTIÓ EL DESEO DE CONFESARSE. ME MARAVILLÓ LA NOBLEZA DE SENTIMIENTOS QUE ALBERGABA; EL DESEO DECIDO DE ENTREGA AL SEÑOR, SU VOLUNTAD FÉRREA DE DEDICAR SU VIDA A LA EVANGELIZACIÓN COMO LO HACEN LOS MIEMBROS DEL CAMINO NEOCATECUMENAL. LA CONVIDÉ A HACER LAS CATEQUESIS PARA ADULTOS Y QUEDO TAN CONVENCIDA DE LA LLAMADA DEL SEÑOR QUE SE LEVANTÓ PARA ITINERANTE DEJÁNDOLO TODO. EL SEÑOR LA ENCONTRÓ PREPARADA PARA EL SACRIFICIO PREMIANDO SUS BUENOS DESEOS. ÓJALA SIRVA DE MODELO A LA JUVENTUD ACTUAL.

          En otro envío

          AL P. SATURNINO DECIRLE Y PONERME A SU DISPOSICIÓN, QUE SOY EL PRESBÍTERO ITINERANTE DEL CAMINO NEOCATECUMENAL, RESPONSABLE DEL CAMINO EN PORTUGAL, QUE TUVO LA GRACIA DE PROPICIAR EL ENCUENTRO DE MARTA CON LA MISERICORDIA DEL SEÑOR Y QUE A PARTIR DE ENTONCES, COMO BIEN DECÍS EN VUESTRO ARTÍCULO, LLENA DE ALEGRÍA SE VOLCÓ TOTALMENTE EN EL CONOCIMIENTO DEL SEÑOR Y DE SUS PLANES SOBRE SU VIDA. ANTE EL PANORAMA QUE LE EXPUSE DE LO MARAVILLOSO QUE ES ENTREGAR LA VIDA AL SEÑOR EN LA NUEVA EVANGELIZACIÓN, LA ANIMÉ A CONOCER EL CAMINO NEOCATECUMENAL Y HACER LAS CATEQUESIS INICIALES. QUEDÓ TAN IMPRESIONADA QUE PRONTO SE LEVANTÓ PARA SER ITINERANTE DEJÁNDOLO TODO. TENGO LA ALEGRÍA DE HABERLA ENCONTRADO EN MI VIDA Y QUE ELLA A TRAVÉS DE MI PERSONA SE ENCONTRARA CON LA MISERICORDIA DE DIOS DE TAL FORMA QUE LA CAMBIARA LA VIDA TOTALMENTE Y PARA SIEMPRE HASTA EL MARTIRIO. QUE DIOS, POR SU INTERCESIÓN, NOS DE LA VALENTÍA DE DEFENDER NUESTRA FE COMO LO HIZO MARTA.

          Ángel Bello

      • 14 de agosto de 2008 - Esteban P.

          La conocí por Internet. Primero fue un mail en mi correo y a partir de allí navegué hasta encontrar su rostro.

          Me impactó su vida. Alguien que nació cinco días después que yo. Que vivió cosas tan parecidas a las mías. Quizás escuchamos la misma música. A mí también me gustan los deportes y también yo incursioné en los medios de comunicación social.

          Pero lo que más me impactó fue su necesidad de reconciliación con el Señor. Creo que la entiendo desde mi experiencia. Me siento identificado con muchas cosas de su vida.

          Largos momentos de oración, coloquio a solas con Cristo. Encuentros en movimientos juveniles, tareas de apostolado, noviazgo, estudio y otras tantas cosas que voy descubriendo en Marta.

          De verdad que Marta me mostró que se puede ser santo en este mundo tan convulsionado, que vale la pena seguir a Cristo. Les digo que la historia de Marta tocó mi corazón para vivir más a fondo mi proceso de conversión a mi Señor.

          Esteban, 39 años, casado con Sandra, papá de María de la Paz y Guadalupe.

          Esteban P .

      • 15 de agosto de 2008 - Marcia J.

          Buenas Señores!!
          Cuando leí sobre el artículo me quede impactada y llena de lágrimas, ya que al igual que esta joven yo también soy del Camino Neocatecumenal, en Paraguay Sudamérica.

          Así como ella, Jesucristo y el amor de Dios tocaron mi vida desde mis 17 años, momento justo del torbellino juvenil, hoy el Señor permitió que en mi vida se renueve el amor... a través del sagrado sacramento matrimonial, ya ahora tengo 28 años...

          Pero lo que más me impactó fueron esas palabras de auxilio y de pedido de fuerza a Nuestro Papá Dios... yo deseo fervientemente que esta causa, la vida de esta joven, sea un ejemplo, fiel y solemne que hoy en pleno comienzo del Siglo XXI, en donde el consumismo, el sexo libre y el sin sentido, muchas veces destruyen la vida de tantísimos jóvenes...

          Desde Sudamérica les envio saludos, y rezo por esta causa y por Marta para que pronto llegue a los altares, junto a nuestro Señor Jesucristo.

          Marcia J.

      • 26 de agosto de 2008 - Ángel Bello (Sacerdote) - II

          Conocí a MARTA, el verano de 1991, poco antes de su martirio. Fue en un encuentro providencial que organizaron en su casa veraniega, las hermanas gemelas Sonia y Estela Gutiérrez Mansilla, inquietas militantes del Camino Neocatecumenal.

          Conocedoras éstas, del momento crítico en su fe, que su amiga Marta estaba pasando, propiciaron un encuentro para que pudiera hablar conmigo. Ella lo deseaba vivamente. Hablamos de muchas cosas relacionadas con mis experiencias apostólicas como misionero-itinerante por tierras lusas y Angola, de donde acababa de venir. 

          Aventuras en medio de la guerra en que Angola se debatía aquellos años y los milagros de la nueva evangelización entre aquellos desamparados negros.

          Ella escuchaba entusiasmada; se transparentaba en su mirada las ansias de entrega generosa a cualquier causa noble. Hablé de la posibilidad en el Camino, de levantarse un diía como catequista-itinerante. Eso creo que le caló de tal manera, que al poco tiempo hizo las catequesis del Camino Neocatecumenal, por indicación de sus amigas y más tarde manifestó el deseo de ser itinerante, levantándose, para ello, en una convivencia. 

          Era una joven alegre, nada ñoña, jovial y amiga de todos. Algo reservada, a veces, por cierta experiencia negativa, según ella, pasada anteriormente; pero abierta y espontánea, cuando cobraba confianza. 

          Cuando le hablé del Hijo pródigo, del Padre de la misericordia, que yo conocía, siempre esperando para abrazarnos, en contraposición al Dios-vigilante y severo juez, vengador de nuestras faltas, que antes nos habían predicado... y recordando la figura de S. Francisco de Sales, modelo de dulzura, que decía que se ataren más moscas con una gota de miel que con cien barriles de vinagre... ella abrió totalmente su corazón a la gracia de tal forma, que, gozosa por la misericordia de Dios recibida y en esos momentos experimentada, corrió feliz a contárselo a sus compañeras Sonia y Estela, como me manifestaron ellas más tarde.

          Creo que fue para ella, esta experiencia de gracia, algo serio y gozoso que le marcó profundamente para el resto de sus días.

          En la FOTO, con MARTA, las dos gemelas y otra amiga llamada Sonia, también del Camino y hoy casada con Andrés y padres felices de 5 retoños.

          Estoy agradecido al Señor de haberme permitido conocer a Marta y de haberla puesto en mi camino, para enderezar el suyo, pues estoy seguro, que ha de ser par la juventud de hoy, tan vacía de valores, un modelo a seguir, de entrega, bondad, entereza, valor y coherencia. NO DUDO QUE ESTARA GOZANDO DEL SEÑOR y que desde el cielo intercede por nosotros. Sin duda ha sido ya una especial gracia concedida a su madre, el poder ésta perdonar al asesino de su hija.

          (Misionero-itinerante en Portugal y países de habla lusa -Angola, Mozambique, Cabo Verde, Santo Tomé y Príncipe, Goa -India- Macau)

          Padre Ángel  Bello.

      • 31 de agosto de 2008 - Luis U.

          Con fecha 23 del pasado mes de Junio tuve la desgracia de que mi hijo Ignacio, de 38 años, casado y con un hijo de año y medio, fuese atropellado por un vehículo, causándole graves contusiones cerebrales. El pronostico de los médicos que lo atendieron, en un primer momento fue poco esperanzador y de salir de esta situación tampoco pronosticaban nada bueno, en cuanto a secuelas.

          Fue internado en la U.C.I. y durante 14 días que estuvo en coma inducido sedado y con ventilación mecánica, le visitábamos a diario toda la familia, que no podíamos creer que esto nos estuviese pasando a nosotros, encontrándonos en un estado angustioso y esperando un milagro a la hora de despertar.

          Durante todos estos días no dejamos de rezar por su restablecimiento y muy especial se lo pedimos a Marta, acompañándonos en todo momento una foto de ella.

          Una vez pasado a planta del Hospital la recuperación ha sido excepcional, tanto es así que a los 15 días lo han mandado a su casa.

          Nadie que no haya pasado por una cosa similar se puede hacer idea del sufrimiento que se pasa y la situación tan angustiosa de toda una familia, padres, hermanos, esposa, que se ven impotentes y no pueden hacer otra cosa más que rezar.

          No sabemos que parte de culpa tiene Marta en la recuperación de Ignacio, pero sí estamos seguros que ha ayudado y nos ha dado fe de su curación.

          Hoy día sigue con su recuperación y estamos muy esperanzados de que todo lo ocurrido quede en un sueño.

          Un saludo

          Luis U. 

      • 10 de septiembre de 2008 - Carmen R.

          Ayuda recibida de Marta Obregón.

          Mi marido tuvo un accidente de coche el 23 de Junio de este año, en realidad le atropelló intencionadamente un empleado que tuvo y al que despidió.

          Le provocó un traumatismo craneoencefálico severo. Consiguieron estabilizarle en el lugar del accidente y fue ingresado en la UCI en estado de coma inducido. Los médicos nos dijeron que no se sabía cómo podía evolucionar, que estaba muy grave y que podría morir. Habría que esperar las primeras 72 horas. Alguien le dio a mi suegro una estampa de Marta Obregón, le dijo que hacía milagros y que nos encomendáramos a ella.

          Yo he llevado esa estampa conmigo desde ese momento y le he pedido por mi marido. Pasadas 72 horas nos dijeron que la presión intracraneal estaba empezando a disminuir y ser controlada (ese dato era el más importante en su evolución).

          Al cabo de una semana comenzaron a reducirle la sedación para que fuera despertándose progresivamente. A partir de ese momento fue respondiendo muy bien a todo lo que se le iba retirando; iba tolerando alimentación, respirando por sí mismo, etc… En unos días salió de la UCI y una semana más tarde ya estaba en casa.

          Hoy es 10 de Septiembre, va recuperándose poco a poco y apenas tiene secuelas. Los médicos y enfermeras que le trataron nos dijeron que era increíble lo rápido y bien que había evolucionado de sus graves lesiones.

          Yo no sé si es un milagro o no, sólo sé que yo le pedí ayuda a Marta Obregón y ya lo creo que la he tenido. Sólo ella sabe lo profundamente agradecida que le estoy.

          Un saludo y Gracias.

          Carmen R.

      • 17 de octubre de 2008 - Ana M.

          Desde que leí el artículo de Marta Obregón me encantó todo: su hermosa juventud, su intensidad de vida limpia y sana. Desde ese día hice fotocopias para mis hijos y amigas, su foto la llevo conmigo y le rezo por la pureza de mis siete hijos y sus novias. Gracias por todo y estaría muy agradecida de tener una estampa original de mi gran Marta.

          Ana M.

      • 20 de octubre de 2008 - Mª Esperanza R.

          Nuevo mini testimonio.

          La hija de mi amiga ha tenido un accidente de moto y ha tenido problemas con un riñón. Como no dejaba de sangrar, yo recé a Marta y ese mismo día dejó de hacerlo.

      • 14 de enero de 2009 - Marta A.

          El pasado mes de julio nos comunicaron que mi sobrino de 3 años tenía un cáncer muy avanzado (un neuroblastema en fase 4), que había comenzado con un tumor en la glándula suprarrenal y se había extendido hasta los ganglios del cuello, afectando en su camino a la médula espinal y a los huesos de la cadera y costillas. Han pasado 6 meses en los que no he parado de rezar ni un día la novena de Marta Obregón y mi sobrino está perfectamente curado, le queda un último tratamiento de radioterapia que es para asegurar más que no se vuelva a reproducir, pero hoy por hoy está limpio de la enfermedad.

          Soy consciente de que muchísimas personas han rezado por él y habrán hecho también otras novenas, pero también de que yo soy una se las personas que tiene más cercanas y eso cuenta más, además repartí entre algunos de mis amigos y familiares la estampa de Marta.

          Quiero agradecer desde lo más profundo de mi corazón este favor a Dios y a Marta.

          Marta A.

      • 31 de agosto de 2009 - Francisco V.

          Muy señores míos: He recibido hoy del Arzobispado de Burgos, un rosario blanco muy bonito y 81 estampas de Marta. Muchas gracias y mi esposa está muy contenta porque dice que éste es su rosario para cada día. Tenemos mucha fe en Marta para que logre poder devolver la salud a mi esposa y frecuentemente cuando me dirijo a ella para pedirle ayuda, no me falta enseguida su favorable solución.

          Estas estampas las repartiré todas y pediré oraciones para su pronta beatificación, que si logra el milagro éste, pediré al Papa la canonice directamente ya que el milagro sería de los más grandes y Marta lo necesita. Tengo fe y confianza y el Señor nos ayude a todos. Con nuestro agradecimiento, estamos con ustedes y reciban un fuerte abrazo de Carmen y Francisco.

          Francisco V.

      • 25 septiembre 2009 - Mª Dolores R.

          Quiero agradecer a Marta su intercesión, para que mi hijo de 18 años haya aprobado segundo de bachillerato y la selectividad en Septiembre de 2009. Su padre y yo hemos luchado mucho para sacarlo del pasotismo que tenía ante los estudios. Una compañera de trabajo me dio una imagen de Marta con una oración, que recé con mucha devoción pidiendo su intercesión, ya que ella era universitaria. Y mi hijo ha cambiado. Gracias Marta y sigue ayudándolo en la Universidad. 

          Mª Dolores R.

      • 15 de noviembre de 2009 - Rosi R.

          Todos los días le rezo a Marta y pongo en sus manos intenciones concretas. Como la conocí muy bien le hablo con la misma naturalidad que lo hacía cuando la teníamos entre nosotros. Lo último que le pedí, fue que intercediera para que un hijo mío no fuera al paro (había muchas posibilidades). Continúa en su trabajo y quiero agradecérselo a Marta.

          Rosi R.

      • 26 de noviembre de 2009 - Elena

          Hola M., soy amiga de María Vallejo Nájera y me ha dicho que te escribiera contándote lo que para mí ha sido un milagro o una serie de Favores, que he notado claramente que Marta hacía por mí, o mejor dicho que Jesús ha hecho por intercesión de Marta.

          Somos muchos hermanos y la verdad es que no nos llevamos nada bien y en cuanto te descuidas saltan chispas en forma de palabras y comportamientos muy hirientes y que yo llevo particularmente mal y me hacen sufrir mucho. El caso es que se avecinaba otra tormenta relacionada con mis padres que viven, y temas de dinero. Empezó un cruce de mails desagradables un lunes y el martes, María me dio la estampa y en seguida la miré a los ojos y supe que me iba a ayudar , empecé a rezarla con mucha fe y llegue a casa con miedo de abrir el ordenador cuando vi llamada con mensaje de una hermana, cariñosa y con muy buena disposición, y seguí rezando y todo se fue arreglando, se pararon las voces y yo de forma casual, como inesperada (gracias a Marta), di con la solución al problema, así que ya no había tema para la discusión ni el follón que se iba a montar. Todo esto en una semana. Yo sé que Marta lo ha hecho por mí, pero es tan personal que sólo yo puedo tener la certeza que tengo de que ella ha cuidado de mí, por el bien de mi familia y de mi madre.

          Como me dijo María te dejo mi móvil XXXXXXXXX, aunque como verás es muy personal... no es el clásico milagro claro, médico, patente...es... muy mío.

          Un abrazo.

          Elena

      • 05 de octubre de 2010 - Francisco V.

          Muy señores míos: Hace mucho tiempo que no les escribo pero me es grato comunicarles que durante este tiempo desde que recibí las estampas de Marta y rezamos la novena todos los días, hemos recibido muchísimos favores por parte de ella. No quiero decir sea verdad o no, pero cuando me encuentro en una situación difícil con mi esposa, que ya les dije está delicada de nervios y depresiones, siempre que acudo a Marta el problema se soluciona, hoy, ayer, mañana, muchos días, ya que Carmen, días está bien y otros no y gracias a Marta se solucionan cosas que aunque parezcan pequeñas, son importantes.

          Nosotros rezamos a San Pancracio, al Sr. Zorzano que era del Opus, al Sagrado Corazón y a Marta Obregón. Pues bien la curación total y absoluta de Carmen solo la puede dar el Sagrado Corazón pero yo le digo a Marta que apriete los tornillos al Sagrado Corazón para que por mediación de Marta se consiga esta curación total y le digo a Marta que si lo consigue se gana no la beatificación sino que iría directo a la canonización ya que son más de 45 años que estamos pidiendo y ya les diré, esta gente del Cielo están todos sordos, hasta el Jefe. Reciban nuestro agradecimiento y afecto Carmen y Francisco. 

          Francisco V.

      • 22 de noviembre de 2010 - Sergio D.

          Hace unos años conocí la historia de Marta gracias a Catholic Net que me envió su biografía como un artículo para meditación y como ejemplo de que aún hay quien quiere agradar a Dios. Le pedí a Marta que intercediera por mi bebé y él actualmente se encuentra sano y creciendo.

          Debo comenzar mi testimonio partiendo del 2005, cuando conocí a una mujercita que por su ternura y forma de transmitir sus ideas me gustó mucho, la conocí una noche de julio en el cumpleaños de una amiga en común. El interés pronto fue opacado al enterarme que ella no comparte mi fe católica, sin embargo, poco a poco me enamoré de ella y con la autorización de la Iglesia, celebramos nuestro matrimonio en noviembre del 2009. Aunque ella renunció a su fe católica, accedió a recibir el sacramento del matrimonio.

          Ella es diabética tipo 1, es decir, su vida depende de inyectarse insulina 3 veces al día; otro dato que no he compartido es nuestra edad, al momento de casarnos ella tenía 33 años y yo 30. La edad junto con su diabetes nos hacía que intentar tener un hijo fuera muy complicado. Así que lo hablamos y decidimos ponernos en manos del Señor, en forma personal solicité a Marta intercediera para que pudiéramos tener un bebé sano y pudiéramos verlo crecer juntos.

          El pasado abril, mi esposa me comunicó que tenía un embarazo de 7 semanas, era una gran alegría para nosotros, inmediatamente recurrimos al doctor para estar seguros que todo estaba bien. Fue un embarazo complicado, primeramente la insulina que utilizaba mi esposa no era la mejor para el bebé, así que tuvieron que cambiársela, sin que pudieran estabilizar sus niveles de glucosa e la sangre durante varias semanas. A finales de octubre, el crecimiento de la placenta, del vientre, el tamaño del bebé visto en ultrasonido y otros factores que utilizan los doctores para determinar la edad gestacional no coincidían, dando entre 31 y 36 semanas de gestación. La placenta comenzó a mostrar señales de descalcificación, posteriormente le detectaron a mi esposa problemas en el funcionamiento de sus riñones y estaba desarrollando preclamsia, todo esto estaba provocando que el bebé sufriera mucho, por lo que los doctores decidieron interrumpir el embarazo pesar de no conocer la edad del bebé con certeza.

          Esta acción era de alto riesgo, pues si el bebé tenía 31 semanas las posibilidades de que sobreviviera eran menores que si tuviera 36 semanas, además, no estaban seguros si el bebé tenía un desarrollo único o diferenciado en sus órganos y cuerpecito. Yo seguí recurriendo a la intercesión de Marta por la salud y vida de mi bebé y mi esposa.

          Finalmente, el 21 de octubre realizaron a mi esposa la cesárea con éxito. Andrés Zuriel nació a las 18.20 hrs con 34 semanas de gestación pesando 2.110 kg y 44 cm de estatura. Al principio presentó dificultad para respirar y después de una semana también presentó ictericia leve y descalcificación moderada. Pasó dos semanas en el hospital, la primera de ellas en incubadora, pero finalmente salió y ahora tenemos en casa a un hermoso niño, sano y fuerte, que cada día crece gracias a nuestro Señor y a la intercesión de Su sierva Marta Obregón.

          Ahora le pido a nuestro Señor que mi esposa acepte que nuestro bebé sea bautizado.

          Escribo este testimonio desde la ciudad de México.
          Que Dios los bendiga.

      • 23 de enero 2011 - Mª José A.

          Lo primero gracias a Dios, por la belleza del alma de Marta, del testimonio de su juventud, gracias por sus padres, y gracias infinitas a Jesús Misericordioso, que a través de ella está haciendo tanto bien espiritual. De manera especial agradezco la relación que nos ha enviado, creo se llama Montserrat, por la que he podido conocer a Marta.

          Mª Josefa A.

      • 25 de marzo de 2011 - Costa Rica - Comunidad Neocatecumenal

          Yo sé que por intercesión de los santos y los ángeles he quedado embarazada, después de 11 años de matrimonio, a una de las personas que le he pedido la intercesión es a Marta, ahora le pido su ayuda, tengo dos meses de embarazo, estamos felices, y le pido que me ayude a que este bebé nazca en santidad, sabiduría y salud, que se vaya formando bien y que el parto sea favorable, que me ayude con los achaques, que pueda tener paciencia, fortaleza y agradecimiento al Señor, por todo el bien que nos ha hecho, por mi esposo, que formemos un matrimonio cristiano, somos de Costa Rica, Escazú.

          Comunidad Neocatecumenal.

      • 28 de marzo de 2011 - Augusto C.

          Muchas gracias por la respuesta veloz. Siento como si conociera a Marta de siempre. Encomiendo a ella a nuestros ahijados (los de mi esposo Augusto y míos). Perdimos todos los embarazos pero sabemos que están en el cielo. A pesar de nuestra edad, también pedimos por nuestra pureza y hacer la voluntad de Dios. Junto a ustedes, Lidia.

          Lidia

      • 08 de junio de 2011 - Compañera de colegio

          Hola a todos. Mi nombre da igual. El de Marta no. Fue compañera mía de curso durante muchos años en el colegio Jesús María de Burgos. Sólo quiero aportar lo que siempre pensé de Marta. Vitalidad, sonrisa, luz... Me recuerda a mi ángel de alas blancas que el Señor decidió llevarse un 31 de octubre de 1997. Su nombre es Elisa, y habló en presente porque está conmigo siempre. También conoció a Marta y estudió con una de sus hermanas en Jesús María. Era genial celebrar los cumpleaños en casa de Marta al lado de la deportiva. Y verla jugar al tenis y tocar la guitarra. En el cielo están las dos llenas de gozo tanto Marta como mi hermana Elisa. Y, ¿sabéis una cosa? SON FELICES Y ESTÁN SIEMPRE EN LA FELICIDAD. Si vivimos en la FE y la FELICIDAD, ellas se pueden acercar siempre.

          Compañera de colegio

      • 14 de junio de 2011 - Familia Neocatecumenal

          Estamos en el camino Neocatecumenal, somos familia monoparental por abandono del padre, manteniendo el matrimonio sin separación ni divorcio, con siete hijos entre 23 y 10 años y tres más perdidos después. Escuché en Radio María hablar de Marta y le encomendé a uno de mis hijos mayores, enganchado a un juego en red que mata continuamente en primera persona, al que, sin trabajar ni estudiar, dedicaba el día, embruteciéndose cada vez más. De las paredes de su cuarto colgaban fotos con flores de marihuana, muy feas. Yo llevaba años detrás de que dejara todo aquello, con enfrentamientos muy violentos alguna vez, sin fruto, sólo iba a misa no todos los domingos.

          Al día siguiente de pedirla a Marta su intercesión, arrancó las fotos de sus paredes, sacó la consola de su mesa y dejó de jugar a ese juego!!! y a otros violentos y no ha vuelto a hacerlo. Durante una semana no jugó a ninguno y empezó, en Pentecostés, a caminar con su comunidad nueva de nuestra parroquia. Pide perdón y ha aceptado volver a estudiar. Gracias al Señor y a la Virgen y a la Iglesia por Marta y su familia. NO FUE EN VANO. GRACIAS, SIGO ENCOMENDÁNDOLE MUCHAS COSAS IMPORTANTES. Gracias hermana que estás en el Cielo con el Señor y la Virgen, trabajando por nosotros, tan bien.

            Familia Neocatecumenal

      • 10 de agosto de 2011 - Inma

          Hola, me llamo Inma. Pertenezco a la 2ª comunidad del C. Neocatecumenal de S. Martín de Porres de Burgos. Yo no conocí personalmente a Marta, pero sí alguna hermana y hermano de mi comunidad. Sencillamente quiero contar algo que me ha sucedido y que no tiene explicación médica. Por un problema de tiroides y con fiebre tuve que acudir a urgencias del Hospital Yagüe el día 5 de mayo de este año (2011).

          Llevaba un tiempo doliéndome la zona del ovario izquierdo, especialmente cuando me presionaban un poco. Tras hacerme dos ecografías, me detectaron un cistoadenoma complicado con septos y algún polo ecogénico de 92x48x45 mm, anexo al ovario izquierdo. Es decir, un tumor del tamaño de una naranja que daba muy mala espina, quiero decir, con posibilidad de que fuera un cáncer. Me ingresaron inmediatamente para intervenirme, pero no pudo ser por los problemas de tiroides que arriesgaban la intervención. Tuve que esperar a que curara la tioriditis. Durante este tiempo, pensé que el Señor quería tener un "serio encuentro conmigo". No sabía cómo se iba a desarrollar todo esto.

          Pedí oración a todos los que pude. Llegó a mis manos la estampa de Marta Obregón con una oración y su foto. Francamente, recé con muy poca fe. Pero sé, (porque así me lo han dicho) que hubo bastantes hermanos que rezaron para que no fuera NADA, mediante la intercesión de Marta Obregón. El día 30 de Mayo, de este año, se me realizó una laparoscopia diagnóstica no pudiendo descartar la tumoración por adherencias que tenía debido a una infección en el Saco de Douglas que tuve hace 13 años, y que estoy viva porque Dios lo quiso. Por lo cual, se hace la laparatomía exploradora, es decir, se abre mi abdomen de arriba hacia abajo.

          Tras la liberación de numerosas adherencias NO SE VISUALIZA TUMORACIÓN en fosa iliaca izquierda. Es decir, NO HABÍA TUMOR. ¿Cómo es posible que un tumor sospechoso de cáncer del tamaño de una naranja desaparezca? ... Dejo aquí mi testimonio, dando MUCHAS GRACIAS A DIOS. No lo puedo callar, LA GLORIA DE DIOS ES GRANDE. Si Dios ha querido que Marta fuera intermediaria en todo esto, MUCHAS GRACIAS A MARTA y también A TODOS LOS QUE HAN REZADO por mí. ¡Qué Dios os bendiga! Poseo pruebas médicas. LA PAZ DEL SEÑOR. 

          Inma

      • Navidad 2011

          Pertenezco al Camino Neocatecumenal y allí conocí a Marta.

          Dos de mis hijos se reconciliaron tras 8 años sin hablarse ni verse. Pedía a Marta su intersección y en poco tiempo se reconciliaron como si no hubiera pasado nada. ¡¡Doy gracias al Señor por sus maravillas!!

      • 22 de noviembre de 2017

          Soy un hermano del Camino Neocatecumenal, pero quiero permanecer en el anonimato.

          Pedí al Señor que por intercesión de Marta pudiera darnos hijos... y así fue. Que esta experiencia ayude a su canonización. Un saludo

      • 23/01/2019 Favor nuevo

          Soy Juana María Aparicio Cascón, viuda de Juan Emilio Delgado García.

          Hace años, hablando con José Antonio Obregón, padre de Marta, él me dijo que pidiera algún favor a su hija, fallecida hacía tiempo, y que lo comunicara cuando nos lo hubiera concedido, y así lo hago.

          Mi marido y yo íbamos los domingos a Misa a la Cartuja de Miraflores y hacíamos andando el camino desde casa hasta allí, de varios kilómetros. Pero llegó un momento en que Juan Emilio ya no podía: un intenso dolor de rodilla se lo estaba impidiendo.

          El traumatólogo le diagnosticó una lesión crónica: osteocondritis (con inflamación del cóndilo interno). Le trataron esta lesión con infiltraciones que le aliviaban y que había que repetir cuando sus efectos beneficiosos se terminaban, porque el padecimiento era, como digo, crónico.

          Así que, recordé las palabras del padre de Marta, me encomendé a ella y pedí por la rodilla de Juan Emilio, por la ilusión que me hacía el poder hacer andando aquel camino, que tan bien prepara para la Misa de los cartujos.

          Cuando acudimos mi marido y yo a la cita con el traumatólogo, después de hacerle las pruebas oportunas, el médico dijo que la osteocondritis había desaparecido. Yo pregunté: Pero era algo crónico, ¿verdad?, y él contestó: “sí, pero ha desaparecido”.

          Todo me agradecimiento a la Sierva de Dios Marta y cómo no, a sus padres, José Antonio y Pilar, que son todo un ejemplo de cómo seguir siempre el camino del Señor, sean cuales sean las circunstancias.

          Juana Mª. Aparicio